Dicotomia En El Matadero ,de Esteban Echeverria

Esteban Echevarría (1805-1851), poeta y escritor argentino, introdujo el Romanticismo en nuestro país. Echeverría vivió en una época de la historia argentina signada por la oposición entre federales y unitarios .Los federales estaban liderados por Juna Manuel de Rosas, cuyo segundo gobierno despótico inspiro a Echeverría a escribir “El Matadero de la Consolación.” Echeverría perteneció a la que se conoce como la “Generación del 37”. Este grupo estaba formado por jóvenes filósofos y escritores, que influenciados por el romanticismo europeo, se interesaron por los temas locales y propusieron una reflexión crítica de la situación política del momento. Esteban Echeverría viajó a los 20 años a Europa para continuar sus estudios y allí se contagio de la nueva efervescencia europea: el romanticismo. En el Rio de la Plata, este movimiento se modeló según las características y la situación política del momento. Sin dejar de lado la sensibilidad, característica primordial del Romanticismo, Esteban Echevarría y sus pares de la “Generación del 37” expresaron en sus obras una interpretación racional del momento histórico en que vivían. La obra de Echevarría demuestra un profundo interés por el presente y no por épocas pasadas y da cuenta de la realidad de una forma más objetiva que la idealista del Romanticismo europeo. El Matadero es una narración alegórica del conflicto entre federales y unitarios. El color local, las costumbres y la exaltación de la libertad y el nacionalismo son característicos del Romanticismo Americano que están presentes en “El Matadero”. Echevarría desarrolla el conflicto entre federales y unitarios utilizando el maniqueísmo, es decir, describe la realidad del momento como una dualidad dicotómica. El tema alrededor del cual se desarrolla el cuento es del conflicto entre Civilización y Barbarie. De por sí ya el mismo tema es una dicotomía. Echevarría ilustra esta dicotomía a través de la narrativa maquiavélica que describe la relación de los Federales y Unitarios con la Iglesia y las diferentes clases sociales.

En el clima de conflicto político en el cual está situado el cuento, el primer tema que emerge como ilustrativo de una narrativa dicotómica es la oposición entre civilización y barbarie. Desde la perspectiva de Echevarría, los Federales pertenecen a la categoría de barbaros, utilizando el poder para subyugar a través de la fuerza a los opositores al gobierno de Rosas. En el polo opuesto se encuentran los Unitarios, hombres cultos y civilizados que utilizan la razón, la educación y la dialéctica para ejercer su oposición. Echevarría utiliza el topos de la Iglesia para expresar esta dicotomía al principio del cuento. Los Federales tenían el apoyo incondicional de la Iglesia y los Unitarios eran descriptos como herejes. La historia comienza con la descripción de una lluvia copiosa que no permitía que el ganado llegara al matadero, causando la hambruna del pueblo. Los Federales, fervientes devotos, rezaban diciendo” Es el día del juicio-decían-, el fin del mundo está por venir .La cólera divina rebosando se derrama en inundación. ¡Ay de vosotros, pecadores! ¡Ay de vosotros , unitarios impíos que os mofáis de la Iglesia, de los santos, ……………………………………….La justicia de la Federación os declarara malditos.”Ante la hambruna del pueblo, Rosas autoriza la entrada de cincuenta cabezas de ganado al matadero aunque era época de Pascua, momento en el que los Católicos realizan abstinencia de carne. Echevarría expresa su oposición, como Unitario, cuando escribe “¡Cosa extraña que haya estómagos privilegiados y estómagos sujetos a leyes

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