Digale a Dios lo que él es.

El tema se llama “Dígale a Dios lo que Él es”. A habido mucho cristianos que hemos sido egoista, que no valoramos lo que Dios a hecho por nosotros, preferimos darle lugar a los malos pensamientos que nos hacen recordar los problemas y dificultades que estamos pasando, pero no nos ponemos a pensar en lo que Dios a hecho ya por nosotros, que ya nos ha librado de problemas anteriores y mas graves que éste. Comencemos a glorificar al Dios todopoderoso, a aquel nos ama, presentemonos al Señor adorándole, en lugar de presentarle nuestro problema, primeramente digámosle lo que Él es y seamos agradecidos por lo que Él ha echo ya por nosotros. El Rey Josafat, en lugar de presentar de inmediato el gran problema que le iba a acontecer, comenzó por alabar al Señor, comenzó a decirle cuan grande es Él, Josafat se concentró en Dios antes que en su problema y temor. Debemos agradecerle al Señor por nuestras victorias, porque gracias a su misericordia y amor, estamos vivos, estamos en un lugar bueno. Después de haberlo alabado y decirle lo que Él es para nosotros, podemos comenzar a presentarle nuestro problema. ¿A quien de nosotros nos gusta que nuestros hijos o algún amigo viene a contarnos sus problemas en lugar de preguntar como estamos o en caso de nuestros hijos, que nos expresen su amor a nosotros?. Debemos ser amorosos con nuestro Padre celestial tener continua comunicación con Él, así como nosotros queremos que nuestros hijos la tengan con nosotros. Después de acabar de adorar al Señor y de decirle cuan maravilloso y poderoso es, Josafat comenzó a decirle a Dios todos los actos poderosos y todas las promesas que le a dado y cumplido a su pueblo. Cuando finalmente presenta su petición, expresó su confianza en que Él manejaría el problema. Esto es lo que dijo Josafat en pocas palabras al Señor, cuando le presentó el problema: “y además, nuestros enemigos han venido contra nosotros para quitarnos la posesión que Tú nos diste como herencia. Sólo quise mencionarte este pequeño problema; pero como Tú eres tan grande, sé que ya tienes todo bajo control”. El Señor tiene un plan para nuestra liberación mucho antes que el problema aparezca. Dios no se sorprende cuando el enemigo ataca. Él tiene todo bajo control, es cierto que es casi inevitable sentir temor o angustia por lo que nos esta pasando, pero debemos tener la fe para confiar en Dios, debemos seguir caminando y no detenernos por ese problema que Dios ya lo tiene resuelto. En lo que debemos concentrarnos es en adorarle y alabarle, porque nuestra confianza esta en Él, caminemos el camino que Dios a preparado para nosotros, que el temor no coma nuestra fe, seamos como Josafat que a pesar de que tenía temor, lo dejó a un lado y comenzó a adorarle y confío en Él, porque es todopoderoso y tiene control de todo, sólo debemos esperar una instrucción de Él, una palabra, y sabremos que hacer y salir en victoria.

“… y dijo: Jehová Dios de nuestros padres, ¿no eres tú Dios de los cielos, y tienes dominio sobre todos los reinos de las naciones?¿No está en tu mano tal fuerza y poder, que no hay quien te resista?”

2 Crónicas 20:6

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