EDUCACION PARA EL DESARROLLO
Enviado por judith6903 • 3 de Julio de 2015 • 1.454 Palabras (6 Páginas) • 153 Visitas
Introducción
El presente ensayo describe brevemente como el enfoque de educación para el desarrollo se presenta o no en nuestras prácticas pedagógicas, a través de las lecturas y el análisis de estas, podremos entender que como maestros siempre estamos aprendiendo, que nuestros estudiantes nos enseñan desde su propia realidad y para utilizar las palabras de Freire “Para ser un buen maestro primero debes ser un buen aprendiz”.
Que no tenemos verdades absolutas ya que con esta posición no hacemos de nuestros estudiantes personas autónomas de su propio aprendizaje y así mismo de sus pensamientos, como maestros no lo sabemos todo y solo a través de la investigación, y el respeto de los saberes del educando lograremos ser docentes críticos.
Las lecturas nos llevan a pensar en un docente, que es un ser humano con una herencia genética, con historia de vida, con diferentes circunstancias y que debe estar libre de prejuicios; pero que debe ser el primero en respetar y tratar por igual a sus educandos generando el clima ideal en el aula.
Al final la pregunta será si nos podremos liberarnos de todo aquello que somos y convertirnos en los educadores sociales que necesita este país.
“El enseñar exige el reconocimiento y la asunción de la identidad cultural”. (Paulo Freire ) Con estas palabras tan importantes hago referencia a labor que realizo en el Colegio Delia Zapata Olivella, pues allí me desempeño como orientadora escolar. El colegio está ubicado en la localidad 11 Suba en el territorio Tibabuyes, allí la población es en su mayoría desplazada, por tanto su origen es de todas partes del país, los padres de los estudiantes se dedican a labores como servicios generales, construcción y reciclar, el 77% de los estudiantes provienen de familias nucleares, el estrato social predominante con 43% es el 2, el 35% es estrato 1 y 22% estrato 3.
Como maestros debemos asumir una identidad cultural y luego respetar la identidad cultural del chico intervenido, esto me ayuda a conocer su entorno, su genética, coloca a mi estudiante en un todo para así acercarme poco a poco a su realidad como ser humano; esto me ayuda a ser ética y justa. La cual es absolutamente fundamental en la práctica educativa progresista. La diversidad de identidades culturales de muestra que el educando es diferente uno del otro, diferencia que permite ayudar efectivamente ya que se tiene que dar solución o respuesta desde él mismo.
Cuando estamos frente al educando en la posición que sea, nos da cierto poder y para el maestro es difícil aceptar que el educando pueda tener razón sobre algún tema, en ese momento el maestro debe ser un buen aprendiz, y estar abierto a las realidades de sus educando, ya que el que enseña aprende a enseñar y quien aprende enseña al aprender.
Paulo Freire, nos hace reflexionar que nunca dejamos de aprender, que constantemente aprendemos algo nuevo en todo momento. Como maestro tanto como aprendiz.
El ser maestro no implica saber todo, la misión es la potenciar el papel de los estudiantes y de trasformar el orden social en pro de una democracia más justa y equitativa, el docente está llamado a reflexionar y dar sentido a esta reflexión con una perspectiva de cambio educativo y social (Giroux) : profesores como transformadores, educadores sociales. En el quehacer de orientación escolar darle sentido a este papel trasformador es hacerlos reflexionar sobre su realidad y como sus acciones pueden llegar a cambiar eso que no les guste o que les incomode, cómo si hacen un buen proyecto de vida y trabajan para cumplir esos sueños van a trasformar ese orden social injusto y poco equitativo. La tarea lograr que los estudiantes se conviertan en ciudadanos con el conocimiento y valor adecuado para luchar con el fin de que la desesperanza resulte poco convincente y la esperanza algo práctico. Por difícil que pueda parecer esta tarea a los educadores sociales, es una lucha en la que merece la pena comprometerse. Comportarse de otro modo equivaldría a negar a los educadores sociales la oportunidad de asumir el papel de intelectuales transformativos (Giroux).
La desesperanza de los estudiantes es el obstáculo más grande con el que se enfrenta la orientación escolar más cuando trabajamos la orientación vocacional, cuando se les dice el año entrante es una nueva etapa y ellos ven que no hay camino, que la universidad pública es lejana por la cantidad de gente que se presenta
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