EL BUEN DOCENTE

ENSAYO

PERFIL DEL DOCENTE

Para poder reflexionar sobre ¿Que elementos docentes se consideran para construir su perfil profesional y personal desde la perspectiva socioeducativa? habría que empezar por definir su finalidad como la capacidad, en primera instancia, de cultivar seres humanos integrales, completos y autónomos; y la ética como valor en la formación, que debe ser inseparable de todo educador, tanto personal como profesional, y la mejor manera de conservarla es convertirla en un principio de nuestra vida cotidiana.

El educador que realmente se precie de amar su profesión le convendrá concebir que enseñar no es solamente transferir conocimiento sino establecer factores para su conveniente creación. Debemos reflexionar sobre la vocación, más que la profesión. Es decir, la profesión, dado que es un sistema de conocimiento, se puede compendiar en programas de estudio, mientras que la vocación en cambio es la respuesta humana a su situación de vida, es la manifestación del ser humano individual, corresponde a su vivencia más íntimamente personal.

Por lo anterior podemos deducir que todo docente tiene que mirarse a sí mismo, percatarse de la fuerza comunicativa que tiene y proyecta. El rasgo más ideal que puede acompañar la presentación del educador es una actitud que revele nítidamente alegría, sensibilidad, compromiso, esfuerzo, deseo de superación, convicción moral, y honradez intelectual. Si un maestro no revela un interés profundo y sincero en las disciplinas que enseña difícilmente hará significativa y motivante para los alumnos la experiencia de aprender. La tarea de enseñar debe irradiar alegría, verdad, y convicción para que induzca aprendizajes jubilosos y comprometidos.

Para llegar a ser un buen docente hace falta mucho empeño, trabajo, dedicación, estudio y experiencia. Un maestro no tiene que ser el ejemplo viviente de todas las virtudes, ni el único o mejor modelo que sigan los alumnos en todos los campos. Sí debe ser un testimonio de superación y desarrollo humano permanente. Es necesario que cada día sienta la necesidad de crecer, de elevar su condición humana. Es simplemente amor hacia todas las personas que depende de nosotros, con un fin “enseñarle el mundo del aprendizaje”. Así como nos los expresa el Prof. Jean C. Betancourt “Si se poco, aprendo; si sabes mucho, enseña”. Recuerda que en cada niño hay un genio por descubrir, no dejes que el tuyo permanezca dormido, es tu deber y tu victoria”. Con Sentimiento…

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