EL DIVORCIO
Enviado por maryvir0982 • 23 de Abril de 2013 • 2.374 Palabras (10 Páginas) • 269 Visitas
REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACION
CENTRO D EINVESTIGACIONES PSICOLOGICAS Y SEXOLOGICAS DE VENEZUELA
SAN CRISTOBAL - ESTADO TACHIRA
RELACION DE LA FAMILIA MATERNO Y PATERNO FILIAL EN EL DIVORCIO
FACILITADORA:
MSc. Dulce Azalia Hevia de Chacón
INTEGRANTES:
María Alexandra Contreras Alarcón C.I.NºV-10748194
Sánchez Duque Hilda Rosa C.I.NºV-10742988
ABRIL – 2013
La sociedad se caracteriza por un constante proceso de cambio; en los últimos años los cambios han estado determinados por los avances científicos y tecnológicos que ocurren de manera acelerada, provocando crisis o desajustes en las familias tradicionales, generando así que el matrimonio en la actualidad sea considerado una opción de último momento, porque se ha convertido en el principal instrumento de frustración, en el generador más importante de las neurosis, de la insatisfacción y de la deshumanización. El divorcio ha tenido que venir a disminuir alguno de los trágicos dramas del matrimonio, porque la unión de dos personas a la fuerza, cuando ya no hay amor ni entendimiento, no puede más que engendrar las peores calamidades, y entonces el divorcio es la única salida posible, cabe destacar que, los problemas que genera la desavenencia de la pareja, las motivaciones de la falta de amor así como la causa de la tirantez de los cónyuges, no van a desaparecer con el divorcio. Pero la separación abre las posibilidades para esas soluciones como también, hace surgir otros problemas sobre todo cuando hay hijos.
La familia es de una importancia vital para el sano desarrollo de los seres humanos. Sin embargo, en algunas circunstancias, la separación puede ser una medida necesaria cuando la relación de la pareja se ha vuelto muy conflictiva, tiene repercusiones graves sobre los hijos y se han agotado todas las vías para resolver la situación (Pérez, M. Riquelme, 2005).
Cuando una relación amorosa suele terminar, las dos personas involucradas en ella generalmente atraviesan por una serie muy compleja de emociones que pueden ser muy dañinas. Dolor, odio, resentimiento, amargura, culpabilidad y un miedo muy grande a la soledad, estos son alguno de los sentimientos que se enfrentan las personas en el proceso de separación.
Una separación legal entre dos personas que han estado unidas por el amor, puede ser una experiencia muy dolorosa y traumática, quizás, hasta un fracaso personal, pero es posible que también sea una buena oportunidad para crecer y madurar emocionalmente. En consecuencia, Pachano (2002) expresa: "Los niños tienen el derecho de ver y estar con sus padres cuando lo deseen, así que no deberá prohibírsele el poder hacerlo" (s/p). Es primordial que los hijos estén al tanto que el hecho de que sus padres se hayan divorciado no significa que se han divorciado de ellos, ya que muchos piensan que los abandonarán, puesto que al suceder la separación suelen vivir la mayor parte del tiempo con uno de sus progenitores, pero el que no sigue viviendo con él seguirá siendo su mamá o su papá, eso no cambiará.
En nuestro país al igual que en muchas partes del mundo es muy frecuente que la familia monogámica se convierta en familia materno filial, es decir, la madre y los hijos conviviendo bajo un mismo techo, prevaleciendo la ausencia del padre bien sea por evasión, divorcio o muerte. Es por ello, que la madre, queda como garante del hogar, hallándose que el papel de padre es difícil de suplantar de forma permanente, no obstante se puede evidenciar el papel de padre sustituto el cual desempeña una imagen masculina o siendo esta también dada por algún otro hombre de la familia, natural o política pero en ningún caso esta posibilidad de sustitución puede ser tan fuerte como la presencia del padre propio.
Cabe destacar que los padres son los primeros modelos que tiene los hijos por excelencia; su labor básica es triangular para encaminar a sus hijos; creando las circunstancias para que puedan compensar sus necesidades y lograr un crecimiento adecuado.
Para que una familia sea operativa tiene que existir una comunicación interesante entre sus miembros, tomando en cuenta las siguientes características como: respeto y amor, sinceridad, alegría, tolerancia, fortaleza, relaciones de igualdad, fidelidad, naturalidad y sencillez, confianza, esperanza y sentido de humor.
Es por ello que a la familia materno filial le corresponde cumplir su rol de una manera operativa en la formación y desarrollo de la personalidad de sus hijos, la cual reside en la factibilidad de todo individuo: como es desarrollarse en un hogar bien formado, obteniendo una buena formación integral, ya que recibirán y satisfacerán sus necesidades y gozarán de todos sus deberes y derechos. Tomando en cuenta que se crean buenas relaciones madre-híjo desde el momento del nacimiento es esencial para el futuro del niño, la madre no sólo proporcionará los cuidados necesarios, sino que a través de ella, el niño podrá percibir el mundo que lo rodea y así poder construir una base sólida sobre la cual levantará su personalidad.
La paternidad y la maternidad como relación familiar interpersonal no es un hecho simplemente biológico; ser padre y ser madre no es estrictamente generar un hijo, sino que también es una acción voluntaria. La filiación no se identifica necesariamente con la procreación porque esta puede darse sin procreación, como en el caso de la adopción.
La paternidad no es únicamente satisfacer una necesidad de la naturaleza: la reproducción y conservación de la especie, es crear unos lazos y valores de justicia, de responsabilidad, de solidaridad y de amor entre padres e hijos y otros parientes, como los abuelos que se encuentran entre los más cercanos. Por eso los hijos, todos, son iguales ante la ley y tienen los mismos derechos no importa que sean matrimoniales, extramatrimoniales, adoptivos, entre otros.
La filiación tiene algunos efectos que originan derechos y deberes naturales, tales como la patria potestad, la obligación de alimentos de los padres, también cuando se han separado o divorciado, la relación paterno-filial entre el hijo y el padre o la madre que no tiene su guarda y custodia, el socorro y la ayuda mutua, el derecho-deber de educar al hijo, la herencia o derecho sucesorio que obliga a la reserva de la legítima y a ser el heredero legal prioritario (junto con el resto de hermanos), a llevar los apellidos de sus padres y a adquirir la nacionalidad de los padres,
...