EL SISTEMA DE CUENTAS NACIONALES (SCN)

EL SISTEMA DE CUENTAS NACIONALES (SCN)

Desde tiempo atrás los seres humanos nos hemos visto obligados a utilizar los recursos limitados que la naturaleza nos brinda para garantizar nuestra subsistencia en el planeta y, así mismo satisfacer las necesidades humanas ilimitadas. Elementos tan valiosos que nos proporcionan beneficios desde cualquier aspecto, ya sea económico, cultural, tecnológico, político, social, entre otras actividades desarrolladas a lo largo de la existencia.

Sin embargo, es fundamental conocer la clasificación de los recursos naturales en renovables y no renovables para determinar si en la realidad no hemos modificado el concepto que los define a cada uno con prácticas abusivas y descontroladas que pongan en peligro la recuperación de tales elementos. Es esencial que hagamos un despertar de conciencias para proteger, usar, administrar, respetar y valorar la riqueza natural que nos sustenta.

Por otra parte, y como último punto de este trabajo, en Colombia y en el mundo entero a todos nos compete el cuidado del ambiente. Pero sobre todo, a las empresas que de una u otra manera en la ejecución de sus actividades para el posterior beneficio económico impactan negativamente en el, y por ser el mismo, un bien público, no se reclama ni se revierten  los daños causados en los procesos, procedimientos y técnicas que desarrollan los entes económicos. Es por esto, que de aquí nace la contabilidad ambiental, como área e instrumento para cuantificar, registrar e informar el deterioro ocasionado al medio ambiente, y las acciones preventivas o correctivas necesarias para evitarlas. Y representadas en las cuentas ambientales nacionales del país, con las cuales se materializan los conceptos e instrumentos macroeconómicos.

Las cuentas ambientales están compuestas por activos, pasivos, ingresos, gastos y costos de carácter ambiental. En primer lugar, tenemos los activos ambientales, que no son más que todos los elementos naturales originados por la naturaleza misma, y que son patrimonio de la sociedad como un todo. Por lo general, son difíciles de valorar en términos económicos. Pero su uso adecuado tiene la capacidad de potenciar el crecimiento económico del país. Ej.: agua, suelo, subsuelo, bosques, aire, etc. Y a su vez dichos activos se dividen en recursos naturales renovables, recursos naturales no renovables y servicios ambientales.

Se debe comprender que los recursos naturales no renovables son bienes que, por sus propiedades, se encuentran en la naturaleza sin que hayan sido objeto de transformación, y no son susceptibles de ser reemplazados o reproducidos por otros de las mismas características. Además se agotan en la medida en que son extraídos y este agotamiento debe revelarse por separado como un menor valor de los mismos. Por el lado de los recursos renovables y servicios ambientales, los primeros son elementos ilimitados y lo segundo es todo aquello que nos brinda la naturaleza, tales como, el agua, el oxígeno, entre otros. Pero de los que hay que tener gran cuidado.

Por otra parte, los pasivos ambientales son los problemas de tipo ambiental que un proyecto o actividad existente, en su condición actual, genera frente a terceros por su construcción o por la presencia de los mismos. En efecto, un pasivo ambiental puede confundirse con un impacto ambiental, o con un daño ambiental, cuando en realidad el pasivo lo constituye la obligación de un gasto de acuerdo con la valoración del daño (eliminar, reparar, restaurar, compensar, etc.) y que causa el impacto ambiental.

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