Educación holista: aprendiendo a ser feliz

FUNDACIÓN INTERNACIONAL PARA LA EDUCACIÓN HOLISTA

EDUCACION HOLISTA: APRENDIENDO A SER FELIZ

MARÍA LUISA MENDOZA GARCÍA

Guadalajara, México. 2016

El Ser humano se deja llevar por el torbellino de actividades cotidianas, tales que se olvida de la parte medular, que son las emociones, la energía que se produce al sentir la paz interior, los pensamientos y proyectos que nacen al relajarse…en sí, vivir en felicidad.

El aprender a quererse y aceptarse tal como se es, permite estar abiertos a cambios, vivir dentro de las posibilidades con que se cuenta, amar y cuidar la función que se desempeña, conocerse, respetarse, buscar una paz y armonía interior.

La docencia permite abrir mentes, no solo es vaciar conocimientos, cumplir con un plan nacional educativo, atender alumnos, padres de familia, cobrar un salario sin ser devengado, realizar evaluaciones, cumplir metas o estar bien con las autoridades.

Va más allá que un compromiso profesional, es un deber particular; cultivarse en lo personal, atender la parte física, salud, emotiva y afectiva con que todo ser humano cuenta, practicar los valores no como un programa que se debe cubrir laboralmente, sino apropiarse de éstos, su práctica cotidiana trae más beneficios que perjuicios, y es a través de ellos que al sentir satisfacción se siente la felicidad duradera y permanente.

La felicidad no se encuentra en comprar un carro, viajar, alcanzar metas, tener un mejor trabajo o sueldo, en si lo material; no la produce o garantiza otra persona; el entregarse al trabajo, vivir esclavizados a cosas superfluas o banales; solo es abrir los sentidos, tener lucidez, aprender a ser feliz, vivir y disfrutar plenamente con lo que se tiene, ser espirituales, emotivos, bondadosos, en armonía, paz interior, en si ser un ejemplo de vida.

DESARROLLO

Es difícil hablar sobre felicidad cuando se está dentro de un torbellino de actividades tales como: el Ser interior, ser madre y padre a la vez, mantener orden en un hogar en cuanto a: platicar con los hijos, atender sus necesidades emocionales, físicas y personales; atender a las dos mascotas que se tiene en casa; limpieza, despensa, preparar alimentos, lavar, planchar entre otros tantos más; de igual forma la labor profesional que como supervisor en el nivel preescolar se tiene y las diferentes funciones que en ello se desarrolla; por último y no menos importante el alimento personal y profesional, un poco de ejercicio, un diplomado sobre las funciones del supervisor en el ámbito educativo, la reelaboración de tesis de doctorado y bien lecturas además de la participación en el postdoctorado de educación holista.

Quizás suene como a queja y desahogo personal, se considera todo lo contrario, pues el hecho de atreverse a escribir los diferentes roles que se juegan, es compartir un sentir, no para ser comprendidos o entendidos; por el contrario, es observar el que desarrollando diferentes actividades, jugando diferentes roles se puede observar la felicidad desde el ángulo del Ser mismo, un Ser tranquilo, contento, quizás un poco estresado, pero feliz y satisfecho de atender diferentes roles además de cumplir en la medida de las posibilidades.

Por alguna razón todo se ha reunido en el hoy, quizás sea una preparación para atender una función con una gama de actividades. Lo que si es cierto, el ser humano está capacitado para atender varias actividades y desarrollar diferentes roles a la vez, todo es posible desarrollando las capacidades que como ser humano se tienen.

Como seres vivos pertenecientes a la especie humana, se tienen sensaciones, sentimientos y pensamientos. Es así que siempre se busca ir detrás de la felicidad, una felicidad momentánea pues se cree que atendiendo ciertas necesidades o quizás caprichos se va a ser más feliz que antes; se cubren las necesidades o los deseos, más la felicidad es transitoria, pues después de poco tiempo se busca otro objetivo para buscar ser más feliz.

Es una falacia, no se está preparado para buscar y encontrar la felicidad en el interior con lo que se tiene. El ser humano se caracteriza por ser medio despistado y egoísta, por lo regular el satisfacer sus propias necesidades es solo eso…satisfacción; mas no encuentra el nexo con la felicidad que invade el cuerpo cuando son satisfechas las necesidades elementales tales como el alimento o evacuar, respirar o expirar, estar sucio o asearse, estar estresado o relajarse.

Por lo regular la felicidad siempre es relacionada con cosas bastas, carnales, atenciones, diversiones, en si la satisfacción personal a través de lo físico o material.

El Dr. Ramon Gallegos, señala que la felicidad es un estado interior que se construye y se cultiva poco a poco a través del tiempo. Es una manera de ser que se aprende.

Dentro del budísmo se manejan conceptos como :

Ananda- alegría (se le asocia con emociones variadas como los placeres de los cinco sentidos), diversión, contento, excitación, alivio, maravilla, éxtasis, exaltación, orgullo legítimo, elevación, gratitud, júbilo malsano, alborozo, deleite, arrobamiento, entre otros.

Sukha- felicidad (de las emociones sanas), la empatía, bienestar, permitir el desarrollo óptimo del ser humano, compasión y amor altruista.

Dukha- sufrimiento (emociones y sentimientos de malestar e incomodidad).

Ricard Matthieu, maneja tres tipos de sufrimiento:

*Visible

*Oculto: se esconde bajo la apariencia del placer, la euforia, la despreocupación, la diversión, es el sufrimiento del cambio; puede darse en cualquier momento a través de un accidente o imprevisto.

*Invisible: difícil de percibir, se origina en el seno de la ceguera de nuestra mente, bajo el dominio de la ignorancia y el egocentrismo.

La felicidad no dura un momento se encuentra en el interior de cada persona no es material, no es traicionar,

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