El Contexto Social De La Arquitectura

La arquitectura y el entorno espacial constru�do tienen una connotaci�n human�stica y social de modo que edificar se considera una dimensi�n del ser humano; se afirma que entre los primeros actos de civilizaci�n est�n la producci�n de instrumentos de trabajo y la construcci�n de la morada o el espacio habitable.

La esencia de la arquitectura es la creaci�n del espacio (arquitect�nico y urbano), que debe constituir el ambiente adecuado para las actividades humanas seg�n un sistema de condicionamientos diversos (tecnol�gicos, ecol�gicos, etc). Por otra parte la relaci�n arquitectura-contexto hist�rico se investiga mediante el an�lisis integral de los sistemas arquitect�nicos y urbanos; por ejemplo esto se evidencia en estudios sociales como los de Engels en el siglo XIX, en los que se explican las infrahumanas condiciones del medio habitable del proletariado ingl�s, lo que se menciona seg�n Sennet como: "..las terribles ciudades industriales de Inglaterra...".

En la conceptualizaci�n del tema una cuesti�n sobre lo human�stico y la arquitectura es c�mo se ha concebido la relaci�n hombre-arquitectura. Aqu� se destaca la escala humana, que significa relaciones del edificio respecto al hombre como referencia, algo que no se manifiesta en el aspecto funcional o utilitario totalmente sino m�s bien con sentido est�tico.

Esto va desde Grecia con la escala humana en el Parten�n, hasta el Modulor, sistema de proporciones ideado por el arquitecto Le Corbusier en 1951 basado en la secci�n �urea, que se rige por las medidas de una figura humana. Lo anterior permite distinguir entre el edificio a escala humana, y el edificio a escala monumental como sucede en Roma, donde lo esencial son las funciones sociales de la arquitectura y la escala no ser� la humana, sino la que expresa la grandeza, el dominio y el poder del imperio.

Tambi�n en Roma se se�ala a Vitruvio, quien establece una relaci�n hombre-arquitectura de tipo antropom�rfica: seg�n la teor�a de la m�mesis de Arist�teles, Vitruvio relaciona los �rdenes arquitect�nicos y el cuerpo humano, as� por ejemplo se establece la correlaci�n entre las partes de la figura humana y las de una columna en arquitectura; estas y otras concepciones similares sobre la relaci�n hombre-arquitectura, comunmente sustentadas en posiciones filos�ficas idealistas y/o religiosas han trascendido hasta el sXX, por ejemplo Bragdon en un texto sobre est�tica de la arquitectura relaciona teor�as antropom�tricas con planos y elevaciones de edificios.

En el Renacimiento el ideal humanista en la arquitectura se manifiesta en t�rminos espaciales, en ejemplos significativos como San Lorenzo se evidencia que el hombre, observador en el espacio, lo "mide" f�cilmente y asimila sus leyes; con Bruneleschi se afirma: "..ya no es el edificio quien posee al hombre, sino es el hombre

...