El Cuidado
Enviado por 10116959 • 26 de Febrero de 2014 • 1.301 Palabras (6 Páginas) • 195 Visitas
Se estima que entre un 19 y un 22% de las familias de Estados Unidos cuidan de un adulto con trastornos cognitivos. Los problemas cognitivos se presentan en toda una gama de enfermedades y trastornos como la enfermedad de Alzheimer, la enfermedad de Parkinson, la apoplejía, los traumatismos craneales y la demencia provocada por el SIDA. Aunque cada enfermedad tiene sus características peculiares, los familiares y cuidadores suelen compartir problemas, situaciones y estrategias comunes, independientemente del diagnóstico específico.
Por lo general, las personas con problemas cognitivos exigen una atención especial, que incluye la supervisión directa (muchas veces durante 24 horas al día), técnicas especializadas de comunicación, la atención a conductas extrañas o difíciles, la incontinencia y la ayuda para realizar actividades de la vida cotidiana, como por ejemplo para bañarse, para alimentarse, para pasar de la cama a un asiento o silla de ruedas, para el aseo personal y otros menesteres diarios.
Si bien cada situación es distinta, es probable que los cuidadores sufran de una gran tensión personal debido a sus responsabilidades en la atención al ser querido. Muchas personas se deprimen o padecen de ansiedad, mientras que otras sufren de trastornos físicos relacionados con la tensión que genera el cuidado del paciente. Es por esto que resulta muy importante encontrar vías prácticas para resolver las dificultades y obtener ayuda.
El cuidado en el hogar
Los cuidadores suelen aprender por ensayo y error las mejores formas de lograr que el familiar enfermo mantenga hábitos correctos de alimentación, higiene y demás actividades del hogar. Es posible, sin embargo, que necesiten entrenamiento especial para utilizar algunos instrumentos sanitarios y para enfrentar conductas difíciles. También es importante que sigan una lista de verificación.
Tenga cuidado con los posibles peligros relacionados con:
• Riesgos de incendio, como las estufas de la cocina, otros utensilios domésticos, cigarrillos, encendedores y fósforos;
• Objetos afilados o puntiagudos, como los cuchillos, navajas de afeitar y agujas de coser;
• Venenos, medicamentos, productos tóxicos de uso doméstico;
• Alfombras, muebles y pasillos congestionados que provoquen caídas;
• Iluminación deficiente;
• Temperatura del calentador de agua para bañarse. Ajuste el termostato para evitar que el paciente se queme;
• Las llaves y/o las bujías del automóvil. No permita que el paciente maneje;
• Otros obstáculos que pudieran provocar caídas, como las mangueras, las herramientas, las rejas.
Cerciórese de disponer de:
• Salidas de emergencia, cerraduras para impedir que el paciente salga de la casa; en caso necesario, alarmas para las puertas y una pulsera de identificación, así como una foto reciente del paciente;
• Barras seguras de las que el paciente se pueda sujetar en el baño, alfombras que no resbalen, vasos de papel en lugar de vidrio;
• Supervisión del consumo de alimentos y alcohol para garantizar una adecuada nutrición y para evitar que el paciente ingiera demasiada o muy poca comida;
• Los números de teléfonos de emergencia e información.
Cómo enfrentar conductas problemáticas
Las personas que padecen de trastornos cognitivos pueden mostrar una amplia gama de problemas de conducta, entre ellos las dificultades de comunicación, comportamiento repetitivo (la fijación o reiteración de una idea o actividad), conductas agresivas o impulsivas, falta de motivación, problemas de la memoria, incontinencia, dificultad para tomar decisiones correctas, deambulación. Entre otras sugerencias útiles para aliviar estos problemas está la de hablarle al paciente con palabras sencillas y hacerle una sola pregunta a la vez. Exponga una por una las tareas y preguntas. Por ejemplo, en lugar de preguntarle:"¿Quieres entrar para sentarte y merendar?", emplee instrucciones sencillas como: "Entra", "Siéntate" y "Aquí tienes la merienda".
La deambulación y la dificultad para tomar decisiones correctas pueden exigir una supervisión de 24 horas al día. Cerciórese de cumplimentar la lista de verificación de seguridad del hogar. Además, averigüe con quién debe comunicarse en caso de emergencia. Puede consultar con sus amistades, familiares, grupos de la iglesia, organizaciones de servicios
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