El Ecosistema

condiciona, ya sea la situación en un momento dado, como su composición, en momentos sucesivos determinados así la evolución del ecosistema.

El análisis de un sistema nos lleva a identificar componentes diversos, ya sea relativo al (medio) como a los organismos que forman la comunidad o biocenosis.

Componentes Abióticos:

La energía solar proviene del exterior del Planeta Tierra, y su disponibilidad es Prácticamente ilimitada, salvo en condiciones particulares del ambiente (subsuelo, aguas profundas). La energía de enlace se encuentra en el mismo ecosistema, ya sea como compuestos orgánicos provenientes de organismos vivos o como compuestos inorgánicos de origen natural, como emanaciones volcánicas (energía terrestre) o derivados de las síntesis químicas que ocurren espontáneamente en la atmosfera.

Componentes Bióticos:

Los componentes bióticos o seres vivientes del ecosistema forman la comunidad de organismos que cohabitan en determinadas condiciones ambientales.

Esta comunidad, típica para cada ecosistema definible en función de su sustrato abiótico, está representada por componentes diversos, clasificables según la forma en que utilizan la energía disponible.

Biotopo y Biocenosis:

El ámbito del ecosistema el biotopo representa la unidad fundamental. Comprende áreas en las cuales las condiciones ambientales fisicoquímicas son uniformes; por tanto en el biotopo está presente una comunidad constante de especies y de formas que lo caracterizan y que, en general, es común a situaciones ambientales similares, aunque independientes.

La biocenosis se define como el conjunto de seres vivos que viven en un biotopo dado. Constituido por especies coadaptadas y adaptadas a las condiciones ambientales del biotopo. En un ecosistema se puede reconocer así biotopo diversos que se distinguen por diferencias ambientales en sentido amplio (las condiciones microclimaticas son muy importantes), suficientes para caracterizar biocenosis precisas.

Tipos de ecosistemas:

En la Tierra hay regiones muy diferentes: unas tienen árboles y otras no; en unas hay agua abundante y otras están casi secas; en unas zonas las temperaturas son elevadas y en otras hace mucho frio la mayor parte del año. Por tanto, podemos diferenciar muchos ecosistemas diferentes. Una clasificación básica distingue entre ecosistema terrestre y ecosistema acuático.

Las plantas y los animales que viven en un ecosistema son distintos a los que viven en un ecosistema son distintos a los que viven en un ecosistema diferente, aunque es cierto que algunos animales se han adaptado a vivir en condiciones muy diversas. Por ejemplo, las personas. Y no encontraremos la misma fauna en un bosque templado en España que en un bosque templado de Australia.

Los Ecosistemas Terrestres.

Dentro de los ecosistemas terrestres podemos distinguir los bosques, las praderas los desiertos o los ecosistemas polares.

º Los Bosques. En ellos abundan los arboles. Existen bosques diferentes en función del clima. El bosque boreal es propio de regiones frías. Ahí viven pinos, abetos y otros coníferos; también lobos, osos o alces. Los bosques templados crecen en regiones con clima templado. En ellos hay hayas, encinas, arbustos...; y también osos, ardillas o ciervos. Y los bosques tropicales aparecen en zonas próximas a los trópicos, donde las precipitaciones son abundantes. En estos bosques existe una mayor diversidad de seres vivos: plantas trepadoras, plantas carnívoras, insectos, ranas, monos, pumas, serpientes.

º Las Praderas. En ellas crecen hierbas o pastos. Por eso abundan los animales capaces de alimentarse de estas hierbas como el bisonte, las jirafas o insectos como las termitas. Y también algunos carnívoros que cazan estos animales, como el leopardo, las hienas los leones.

º Los desiertos. En estas regiones llueve muy poco. Existe poca vegetación y pocos animales son capaces de sobrevivir. Los seres vivos que viven en los desiertos, como el cactus, el camello o algunas serpientes, se han acostumbrado a vivir con muy

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