El Enfoque De Competencias En La Educación. ¿Una Alternativa O Un Disfraz De Cambio?

El enfoque de competencias en la educación.

¿Una alternativa o un disfraz de cambio?

ÁNGEL DÍAZ BARRIGA

El campo educativo en su determinación axiológica presenta la necesidad de adoptar constantemente nuevas formas de acción. En este caso el autor maneja a la innovación como la necesidad que presenta el campo educativo por adoptar nuevas formas de enseñanza, como un mero síntoma de adaptación y manejo de información actual. Pero la innovación en el campo educativo no siempre es desarrollada a partir de un plano reflexivo, más bien está acompañada de compulsividad o apresuramiento hacia la aplicación de nuevas metodologías sin analizar verdaderamente su pertinencia.

Ahora bien el autor plantea que el enfoque por competencia llega al plano educativo como un elemento de innovación sujeto a los mismos errores de todos los enfoques pasados. Desde que el concepto de competencia fue introducido como un aspecto metodológico en el desarrollo de acciones educativas se generaron mayores estudios teóricos-literarios, lo que originó una serie de conceptualizaciones relacionadas a este; formulación de competencias, planes de estudio, propuestas educativas. Todo lo anterior de acuerdo la interpretación de los distintos niveles educativos: básico, media superior y superior.

Por tanto el enfoque por competencias al ser un sistema innovador se somete a los mismos errores que cometieron los enfoques pasados, al volverse una metodología descalificativa de acciones realizadas, así como de los elementos usados en prácticas efectivas por los enfoques anteriores, volviéndose eminentemente inmediatista al plantear y ejecutar sus preceptos sin estar basados en decisiones racionadas y reflexionadas para ser ejecutadas en el campo de acción. De esta manera este modelo solo sirve para justificar el discurso de que se está innovando, respondiendo a políticas y no a necesidades pedagógicas.

El enfoque por competencias no solo enfrenta esta disyuntiva sino también se enfrenta al problema de su conceptualización, el concepto de competencia no presenta perspectiva genealógica, no tiene connotación, las disciplinas la interpretan y la adaptan dándole su propio significado. Ante esta falta de significantes presenta una usencia de reflexión sobre su aplicación y su desarrollo, siendo esto uno de sus principales impedimentos para que los currículos puedan implementarla asertivamente. Lo anterior hace que exista controversia en la alta integración de competencias (generales) y la integración de competencias menores (especificas) por lo que dificulta desarrollar una clasificación.

En el campo de la educación el enfoque por competencias tiene poco tiempo en su aplicación, el primer plano en el que fue desarrollada su aplicación fue el nivel técnico medio en el cual se le dotaba al alumno de los elementos indispensables

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