El Payaso
Enviado por pepita09 • 30 de Enero de 2015 • 2.490 Palabras (10 Páginas) • 134 Visitas
dicado a Lauri Rodríguez García, el ángel de mis sueños…
El: Yo estaba bien estando solo, antes era tan natural para mí, estar con alguien más jamás pasó por mi mente, después de pasar tanto tiempo juntos, aprendí muchas cosas de ella y experimentamos muchas cosas juntos.
Empezó a parecer que los días que estuve solo eran una mentira.
Ella: Esa vez, en ese lugar, desde que miré su espalda, no he dejado de pensar en él, siempre he estado sola, tengo mucho que dar, pero no sé por dónde, o ¿con quién comenzar?
El: Yo solo sirvo para golpear y romper, toda mi vida ha sido así, no soy más que un pobre cavernícola, quisiera buscar una razón para usar estos puños, quisiera usarlos para proteger a alguien, quisiera tanto ser feliz… Toda mi vida he estado solo no he tenido más que la compañía que de mi fuerza.
Ella: Fue en ese instante, en ese instante que se hacía eterno, en que decidí que siempre estaría a su lado, yo solamente quiero que sepas que gracias a ti soy feliz Elvis…
Perdón por cada instante en que te lastime sin darme cuenta, cuando te conocí supe que me gustaría estar toda mi vida contigo…
Los Dos: Hoy tres de Septiembre he conocido a una persona, es una misteriosa persona, no sé porque, pero por alguna razón cuando le veo no puedo dejar de sonreír, sé que sonara tonto, pero creo que me he enamorado, si, definitivamente me he enamorado de esa persona, sé que es algo torpe y tonto, pero es amor, ¿quizás un amor no correspondido?
ENAMORADOS
Ha nacido un niño prodigio, se convertirá en un genio, será la esperanza del país, cosas así eran las que todos los adultos que me rodeaban siempre decían de mí.
Nunca conocí a mi padre, lo único que sé dé él es lo que mi madre me dijo; él era un hombre muy importante, era admirado y querido por muchas personas, que el saliera en los diarios o noticias era muy normal, cuando mi madre me conto estas cosas de él, yo pensaba que él debía ser una especia de superhéroe, y era yo el heredero de sus súper poderes, así que un día cuando crezca me convertiría en superhéroe.
Poco después supe que el en realidad, en vez de ser un superhéroe era un villano, era obvio que yo también un día sería un villano, mi padre tenía otra familia, conoció a mi madre en un viaje de negocios, apenas él supo que ella me esperaba, le dijo que si me tenía jamás volvería a verlo, y que el hijo que ella esperaba seria cualquier cosa menos de él.
Nunca entenderé como mi madre, podía expresarse tan bien de un ser que le hizo tanto daño, ella siempre decía que odiarlo sería como odiarme a mí, ella se hizo cargo de mi sola, trabajaba todos los días en un restaurante del centro, a pesar de lo agitado de su trabajo siempre se daba tiempo para mí.
Yo por mi parte, por alguna razón pensaba más rápido que los demás niños, en mi mente calculaba todas las probabilidades existentes, por esa sola razón, todos me decían genio, no hacia más que escuchar elogios de los profesores, en poco tiempo me convertí en objeto de estudio, el nacimiento de los genios era raro, todos decían que un día haría algo por la vida, pero en realidad yo, yo, solo quería ser feliz.
Amigos, emociones, sentimientos, amor, los alejé de mí, tenía que hacer lo que sea para sobresalir del resto de los demás niños, siempre menospreciaba a las demás personas, camino a casa solía reírme de ellas, en los exámenes que nos tomaban siempre sobresalí y provoqué la ira de muchos niños de grados superiores, de los que antes que yo llegara eran objeto de veneración, no existía profesor que no me hiciera caso, y si alguien me molestaba o se burlaba de mí, inmediatamente era mandado a la oficina del director, siempre pensé que esto debía ser una especie de súper poder, después de todo no hay que olvidar que los heredé de un villano, yo sabía que podía ser mejor que él pero nunca lo quise aceptar, nunca quise aceptar al tipo de persona que yo era en realidad, así que me hice un disfraz y una máscara.
Un día llegó una misteriosa chica a la clase, era más pequeña que las demás niñas, tenía el cabello castaño rizado, unos ojos que por alguna razón me hipnotizaban, ella era de una buena familia, su padre era un industrial de un país lejano, era preciosa, lista, con un buen corazón, ella había sido bendecida por Dios en todos los sentidos, yo dentro de mí me enfurecía, me decía como alguien puede tenerlo todo mientras que yo me esfuerzo todos los días por sobrevivir.
Pero, no, no la odiaba, ella me interesaba, pero no debía hacer caso a eso, ya que yo tenía una meta, estudiar y ser becado en el colegio secundario más prestigioso de mi país, así mi madre no tendría que esforzarse tanto. Todos querían conocer a la nueva de la clase, pero por alguna razón no se atrevían a mirarle, a algunos les daba miedo saber quién era, a otros la envidia los lleno, así que decidieron ignorarla, ella por su parte en poco tiempo se apegó a mí, algunos la evitaban otros le daban un trato preferencial, el único que podía tratarle como un igual era yo.
Para mis todos eran iguales, ninguno solo me importaba, esa palabra amigos no existía en mi concepto.
Yo siempre era el escogido para ayudar a los profesores, a revisar textos, hacer cronogramas, a hacer fichas, a ordenar a mis demás compañeros, así que siempre me quedaba hasta muy tarde en la escuela, y ella solía quedarse conmigo.
¿Viste la película de anoche? ¿Quisieras ir a comer helado de chocolate? ¿Vamos a jugar a mi casa? … Ella hacia muchas preguntas y siempre que yo le decía no a todo, ella buscaba una forma de sacarme de mí mismo.
¿Te gusto? Ahhhhh no… (Mentira) era claro que ella me interesaba mucho, pero ya era tarde para mí.
Para mí nadie valía la pena, y yo trataba mal a las demás personas, por esa razón nunca le importé a nadie, menos hubo alguien que se interesada en mí, pero… esa chica solitaria fue la único que se acercó a mí.
Ella era de una familia muy influyente, vivía en una enorme mansión afueras de la ciudad, que no daría yo por tener una casa así de grande, ella vino a vivir a esta ciudad para pasar un tiempo con sus abuelos, según me dijo; si ellos sabían de un problema inmediatamente la cambiarían de colegio y tendría que regresar a su país.
Yo solía ser amenazado y hasta perseguido por muchos niños, me acusaban de haber hecho trampa en los exámenes, habían cinco niños que me hacían la vida imposible, ellos antes de que yo llegara eran los estudiantes más destacados de la escuela.
Siempre
...