El autoritarismo docente
Enviado por Vi11 • 7 de Marzo de 2019 • Ensayo • 712 Palabras (3 Páginas) • 95 Visitas
Carta de lector:[pic 1]
Autoritarismo docente versus inclusión educativa
Sabemos que la práctica docente implica una relación de asimetría respecto al conocimiento, entre quien enseña y quienes aprenden, y que la misma se sustenta en la lógica de saber-poder. También reconocemos que la autoridad genuina de un docente frente a su clase es imprescindible para lograr los objetivos de enseñanza-aprendizaje propuestos.
Sin embargo, cuando la práctica del docente se erige exclusivamente en base a concepciones tradicionalistas, y el comportamiento de los estudiantes debe, necesariamente, adaptarse a lo esperado por el profesor, nos encontramos ante el problema del autoritarismo docente. Dicho autoritarismo, puede manifestarse de distintas maneras mediante el posicionamiento adoptado por el docente respecto a los alumnos y a su propia práctica. La manifestación más directa y explícita de ese autoritarismo se refleja en el orden establecido dentro del aula, en la imposición de la disciplina, en la intimidación a los estudiantes, en el sometimiento de los mismos y en el acatamiento incondicional de las órdenes o consignas recibidas, pero también a través de acciones más sutiles…
Así, tanto en el nivel secundario como en el superior, existen docentes que en su práctica educativa, ya sea de forma consciente o inconsciente, ejercen el poder de una manera autoritaria, y como consecuencia de ello, los alumnos se sienten intimidados e inseguros de lo que saben y hacen, o peor aún, de lo que son capaces de hacer y de aprender, reflejando su angustia mediante expresiones de malestar, impotencia, desinterés, apatía, y en casos extremos, a través de la violencia. Esto ocurre cuando la heterogeneidad de perspectivas e intereses que debería ser respetada y fomentada como medio de construcción democrática de conocimientos y de buenas relaciones educativas, que abren espacio al diálogo, a la crítica y a la reflexión, son obturados por la posición reaccionaria que sostienen algunos docentes al considerar que jamás pueden equivocarse, que los estudiantes deben aprender de ellos y que si hay alguien que se equivoca, siempre es el alumno.
En esta situación, es en el profesor donde se centra todo el poder y todo el saber, y por ende, no hay espacio para la generación del vínculo educativo, ya que la “enseñanza” impartida por este tipo de docente es de carácter unilateral y no le interesa demasiado si los estudiantes aprenden o no, si realmente comprenden lo que se ve en clase, puesto que lo más importante es terminar el programa. A su vez, cuando eso no resulta posible, estos profesores se quejan de los alumnos y los rotulan de pasivos, negligentes, dependientes y los reprenden por no estudiar lo suficiente, sin preguntarse o reflexionar si ellos como profesores brindan las herramientas, la orientación y, principalmente, la confianza necesaria para que los estudiantes aprendan a aprender.
...