“El discurso de las víctimas”.

“El discurso de las víctimas”

Es importante mencionar que en el ámbito legal siempre se le da  ha dado más importancia al criminal y a la víctima siempre se le ha dejado de lado, no se preocupa por darle una atención correcta así mismo tampoco se ponen a indagar más sobre la persona que se presume como una víctima, basta que esa persona  diga que no lo es y las autoridades pertinentes ya no hagan nadan.

Hay personal capacitado a donde se les podría remitir a este tipo de personas que niegan ser víctimas pero se tiene la sospecha que sí lo son, de esta manera al canalizarlas se detectaría si en verdad son víctimas de un delito o no.

La victimologia tiene ciertos avances y nos ha enseñado y las ha hecho visibles, sabemos que cada víctima es diferente y que deben de tener un trato diferente, por lo tanto también deben ser consideradas, de esta manera entendemos a la víctima pero al mismo tiempo vamos entendiendo al delincuente no podemos separar uno de otro.

En la conferencia nos menciona que hay víctimas que tienen un discurso impuesto y esto permite que los delincuentes no paguen por el delito y es donde debemos actuar, donde seamos capaces de identificar este tipo de víctimas.

En los delitos de trata de personas las victimas deberían ser tratadas especialmente ya que se juega con su memoria y se les impone un discurso, los tratantes de blancas han ido evolucionando así como han ido evolucionando las leyes, ahora resulta que ellos tienen mejores defensores que las mismas víctimas.

La historia de vida podría ser una técnica para entrevistarlas ya que en ellas nos podemos ir dando cuenta de lo que es importante, la forma en que lo organizan ya nos deja ver partes fundamentales de su vida y cuando intervenimos podremos darnos cuenta que en realidad son víctimas, aunque el discurso sea impuesto este será revelado.

Como se menciona en el video el problema no son los tratantes de blancas, el problema son las personas que están dispuestas a contratar estos servicios y no es solamente personas de clase baja o media, si no también personas que tienen mucho poder y que pagan sumas exorbitantes tan solo para estar con chicas menores de edad y que los lugares a donde van también son protegidos por el poder, pocas son las veces donde se hacen cateos en este tipo de casa de citas, la mayoría se hacen en zonas de clase baja media.

Otro punto importantes es que las chicas al momento de encontrarse en esta situación no saben a quién pedir ayuda, si la misma gente que pasa a su lado se les queda viendo raro y se las etiqueta de “Putas” “Prostitutas” y de más, hasta el mismo policía de la colonia se acuesta con ellas es obvio que no saben a quién recurrir.

Muchas de estas chicas son traídas con engaños o amenazadas con su propia familia así que no encuentra una salida fácil de este problema.

Nuestro deber como criminólogos es darles un trato digno  brindar la confianza suficiente para poder derrumbar ese discurso impuesto por los tratantes de blancas, identificar el problema y darle un seguimiento hasta que se les haga justicia.

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