El objetivo de analizar las creencias populares antes de darlas por válidas

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Introducción

El objetivo de analizar las creencias populares antes de darlas por válidas, es contar con la información que sustente o desmienta las mismas antes de tomar una decisión relativa a ellas; no es recomendable llevar a cabo una acción o reacción únicamente basado en el dicho de una o varias personas sin antes haberlo contrastado con fuentes fidedignas.

Es así que tenemos ejemplos contemporáneos que pueden dar suficiente luz al respecto. Hace unos meses en algunas delegaciones de la ciudad de México y municipios mexiquenses colindantes, se desató una paranoia generalizada, en la que miles de personas compartían información sobre supuestos actos vandálicos, saqueos y desmanes provocados por encapuchados que avanzaban implacablemente por las calles cercanas (no se sabe cercanas a donde pero todo mundo asumía que a ellos, lo que puede también diagnosticarse como un rasgo egocentrista de toda una sociedad.); el caso es que me encontraba en una estética, la estilista que me atendía era originaria de un municipio parte de la zona metropolitana del Valle de México y su teléfono comenzó a sonar de manera reiterada por lo que se dibujó en su rostro una expresión de angustia, a lo que solicité que atendiera señalando que por mi parte no había problema. Mientras se encontraba atendiendo su llamada, solo vi como la angustia se convertía en temor e incluso comenzó a mostrar nerviosismo en el movimiento de las manos; al colgar me dijo que le había hablado su prima para comentarle que “estaban secuestrando a las chicas de los camiones que llegaban a ese municipio, habían quemado los comercios más grandes del lugar y se había ordenado un toque de queda”, lo que me pareció alarmante pero inverosímil.

La estilista continuó cortando mi cabello, sobra decir que el corte fue un desastre pues ella se apresuró a terminar, no sin antes llamar a su jefe y luego de repetir lo que había dicho su prima, lo aderezó diciendo que ya le habían llegado mensajes que reportaban que los saqueadores –ahora secuestradores, violadores y pirómanos- avanzaban con paso firme y veloz rumbo a la estética. Según me contó, mientras pagaba por el peor corte de cabello de mi vida, su jefe – el dueño de la estética- había instruido el cierre de las 8 unidades económicas que posee en la zona.

El dueño de las estéticas tomó una decisión que les hizo perder clientes y repercutió en las finanzas de la empresa, todo basado en la creencia colectiva de los desmanes. Al final lo único cierto fue que en un municipio del Estado de México, encapuchados saquearon una tienda Elektra. El resto fue una suerte de teléfono descompuesto que golpeó la economía de muchos emprendedores. Por ello es importante analizar las creencias antes de asumirlas como ciertas.

Durante el desarrollo del presente proyecto, se analizaron tres creencias populares, que si bien no corresponden a un ataque de pánico como la experiencia narrada líneas arriba, si impactan negativamente en un gremio y posteriormente en la economía, patrimonio o libertad de las personas a partir de la toma de decisiones erradas. Las creencias populares seleccionadas fueron que los abogados cobran mucho; que lo pueden todo; y que son alcohólicos; eligiendo la primera como punto de análisis debido a que –a pesar de ser subjetiva- proporciona cierto campo de acción para la investigación, a diferencia de los otros ejemplos en que los indicadores resultarían difusos por no decir inconmensurables.

De esta manera, se aplicaron los principios del pensamiento crítico a un caso concreto, permitiéndome comprender tal concepto como una forma de pensar basada en la reflexión, análisis y el razonamiento de la información con que contamos para tomar una decisión, dar una opinión o llevar a cabo una acción, dejando de lado la pre existencia de juicios de valor, dogmas o creencias.

Por tanto, podemos decir que un pensador crítico es una persona abierta al diálogo y al debate, que posee o busca poseer la mayor cantidad de información antes de pronunciarse respecto a algún tema o de tomar una decisión, con tendencia a cuestionar y verificar lo que le es dado. Así, el pensador crítico está en aptitud para indagar, tantear la situación y detectar los síntomas a fin de determinar la existencia o no de un problema, revisando, combinando, integrando y clasificando la información con la que cuenta.

Desarrollo

Creencia seleccionada para analizar desde el pensamiento crítico

“Los abogados cobran mucho”: Las personas tienen la creencia de que los abogados cobran muy caro para lo que hacen, porque desgraciadamente existen algunos “profesionistas” que se encargan de hacer las cosas mal y cobran cantidades excesivas, por lo que en general se piensa que no trabajan y cobran.

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