Frituras, Sañinas O No.

FRITURAS

Las frituras de maíz y trigo son una de nuestras botanas preferidas, además de sabrosas están a la venta en cualquier esquina. ¿Sabes qué es lo que se oculta en ese exquisito sabor?

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El sabor característico de este producto viene de la mano de sus ingredientes: maíz y trigo, aceites vegetales y condimentos como sal y saborizantes. El resultado de la mezcla es una botana de alto contenido calórico por la presencia de carbohidratos y las grasas que se absorben durante su elaboración.

De acuerdo con estudios realizados por la PROFECO en 100 grs. de frituras puedes obtener de 430 — 576 kilocalorías dependiendo la marca.

Las frituras carecen de proteínas, vitaminas y minerales; esto logra un desequilibrio nutrimental que coloca a este producto en la lista de alimentos no aptos para el consumo diario, mucho menos como un sustituto de desayuno, comida o cena.

Además de las grasas, son ricas en sodio, este mineral que en exceso es el causante de la hipertensión y retención de líquidos. La PROFECO informa que 100 gramos de este tipo de frituras contiene entre 426 y 2,673 miligramos de este mineral, cuando la cantidad de sal diaria no debe superar 2,400 miligramos de sodio en el día.

La obesidad alrededor del mundo esta relacionada con la ingesta desmedida de alimentos procesados ricos en grasas, sal y azúcar añadida.

Qué tu salud no se convierta en la botana de las frituras.

CRONODIETA

Según explican los nutricionistas que siguen esta doctrina, desde las 5 de la mañana a las 17 horas se suceden doce horas en las que los nutrientes aseguran nuestro gasto energético. A partir de entonces y hasta las 5 de la mañana son almacenados y utilizados para la organización tisular (formación de tejidos). Información que, por otro lado, confirma el dicho de mi abuela: "come poco y cena temprano si quieres llegar a anciano".

Organizar el menú familiar teniendo en cuenta el ritmo del cuerpo ayudará a no acumular grasa porque sí. Aquí van algunos consejos:

- Lo ideal es tomar los hidratos por la mañana, sobre todo en el desayuno, cuando "engordan" menos ya que tendrás todo el día para quemarlos. Es la hora de los dulces, las frutas… También de los cereales y las harinas. Es más, si has comido suficiente dulce antes del mediodía, por la tarde tu índice glucémico te protegerá y tendrás menos hambre.

-Las proteínas deben ser ingeridas a partir de la tarde. Para la noche, carne, pescado, huevos o quesos frescos con verduras cocidas. Y el chocolate, más cerca de la noche, ya que estimula la melatonina, hormona que favorece la relajación y el sueño.

- No saltar comidas. Menos el desayuno y la merienda, las más importantes, ya que te permitirán llegar a la comida y a la cena con el hambre justo.

- Escucha tu cansancio y duerme lo que el cuerpo te

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