HOY POR TI MAÑANA POR MI

Un refrán popular dice “hoy por ti mañana por mí” refiriéndose básicamente al valor de la solidaridad y la cooperación que como seres humanos debemos tener con nuestros semejantes, valor que lo aprendemos desde el ejemplo y la educación en nuestras familias y que depende de esto para proyectarlo o no en nuestra sociedad y es tan fundamental que influye en como construimos Democracia pues es la esencia de lo que se denomina Capital Social, Putnam (2002) lo define como: “presencia o ausencia de colaboración entre las personas”,

Hanifan, fue el autor que empezó a hablar del término capital social en 1920 y manifestó que existía este fenómeno donde se acumule el compañerismo, la buena voluntad, la simpatía, las relaciones sociales, la unidad social, la interacción, puestos principios son los que influirán en la satisfacción de las necesidades sociales y por ende en el mejoramiento de la comunidad.

¿Les suena familiar esto?: una sociedad capitalista donde se desconoce el concepto de ciudadanía, se percibe los asuntos públicos como un negocio de los políticos y no genera interés, no hay organización de la sociedad civil, no se tiene el concepto claro de lo que es democracia, no hay confianza en un gobierno porque se puede llegar a pensar que no se cumplen las leyes, al estar atrapadas en este círculo vicioso las personas sienten vulneración en sus derechos lo que genera desamparo y baja calidad de vida.

Si su respuesta es afirmativa lo anterior es lo que se conoce como comunidad incivil, una comunidad sin capital social donde no hay cooperación entre los ciudadanos y por ende no se ejerce una verdadera democracia, no olvidemos que “La calidad de la democracia depende de la calidad de la sociedad en la que está inserta” (Warren, 2001).

Frente a esto tengo tres interrogantes:

1. ¿Será que nuestro país ejerce una verdadera democracia?

2. ¿Qué necesitamos para ejercerla?

3. ¿Qué estamos haciendo como jóvenes para cambiar la situación en nuestra generación?

1. Considero que nuestro país hace parte de la consecuencia de conquista española que por tradición se caracteriza por el autoritarismo centralista, el patrimonialismo y el clientelismo que heredaron de España y que se sigue viendo en nuestros días y actualmente aún más se fortalece con el mal uso de la tecnología me refiero a la televisión e incluso al internet, estos fenómenos han hecho de que nosotros nos individualicemos de alguna manera aun más y que asumamos las realidades que nos presentan en la televisión, nos volvamos conformistas, miremos los asuntos políticos con desinterés como si fuese un “show más”, no interactuemos, no hablemos de los asuntos que como ciudadanos nos competen y por ende no nos organizamos, no cooperamos, no incrementamos el capital social y nos quedamos de brazos cruzados sin aportar

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