IMPUESTOS EN LA HISTORIA

IMPUESTOS EN LA HISTORIA

La historia de los impuestos es casi tan antigua como la historia del hombre pensante. Desde las primeras sociedades humanas, los impuestos eran aplicados por los soberanos o jefes en forma de tributos, muchos de los cuales eran destinados para asuntos ceremoniales y para las clases dominantes. La defraudación de impuestos teniendo el carácter y destino que se les daba eran poco comunes, debido al control directo que de la recaudación hacían sacerdotes y soberanos.

Los antecedentes más remotos de los sistemas impositivos contemporáneos los encontramos en los censos, derechos y servidumbres que se percibían en la Edad Media y que en cierta forma han subsistido hasta nuestros días con las modificaciones y transformaciones que el progreso de la ciencia de las finanzas y de las necesidades económicas de los Estados han impuesto; pero indudablemente un gran número de los gravámenes actualmente se encontraban en germen en las prestaciones que exigían los señores feudales. Para esta investigación se tomó como referencia dos impuestos que con el pasar de los días, uno de estos, se sigue viendo en algunas religiones y en la compra de inmuebles como se explicara a continuación.

• Diezmo

En la cultura cristiana, este era un aporte por parte de los dueños de las tierras por los frutos que provenían de siembras, animales, frutos, todo lo que fuera productos pero no dinero. Este impuesto consistía en el aporte del diez por ciento (10%) del resultado de todo lo anteriormente nombrado.

“En los primeros tiempos de la Iglesia los Apóstoles y demás sacerdotes se mantenían con las ofrendas voluntarias de los fieles las cuales eran numerosas y en algunas partes no solo sufragaban para el sustento de los ministros y gastos del culto sino también excedían y sobraban para los pobres”

Aun después de las investigaciones que se han realizado respecto al diezmo, no es muy claro el hecho por el cual se empezó a pagar este impuesto que se siguió pagado durante tres siglos en los que hubo persecución a la iglesia, esto no quiere decir que las iglesias hayan sido quienes hayan introducido este impuesto pero si quienes siglos más adelante incitaban a la regalía de la moneda en los pueblos cristianos.

• La Alcabala

Es el tributo que se cancela por las transferencias de inmuebles urbanos o rústicos a título oneroso o gratuito, cualquiera que sea su forma o modalidad, inclusive las ventas con reserva de dominio. La transferencia puede darse mediante una venta, donde hay dinero de por medio (oneroso) o en forma de donación (gratuito).

La alcabala fue una de las figuras fiscales más antiguas e importantes de la Hacienda del antiguo régimen español. Desde que se inició el cobro de la alcabala en 1571, ésta fue establecida como un impuesto que gravó las transacciones mercantiles, su pago debía efectuarse en el momento de introducirse los efectos en el suelo alcabalatorio y sin aguardar a su venta. Los sistemas de cobro fueron tres: la administración directa por parte de los funcionarios reales, el arrendamiento a particulares y el encabezamiento realizado por determinadas instituciones como los ayuntamientos y los consulados de comercio, quienes pagaban un monto fijo cada cinco años.

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