Introduccion Ambulantaje

Introducción.

Los pobladores originales, no lograron ser todo lo virtuoso que se esperaba para esta ciudad ideal, pues entre ellos se encontraba una buena dosis de “hombres de poca suerte y pobres errabundos” para ellos la ciudad de puebla representaba el instrumento que permitiría acabar con los visión derivados de una vida de ociosidad. El centro de la ciudad a sido el escenario de esta forma de relacionarse y de sus explosivas: desde los universitarios hasta los vendedores ambulantes, pasando por una amplia gama de sectores sociales, todos ellos han tenido como escenario de sus luchas y confrontaciones al ahora llamado centro histórico.

Vivir en paz significaría que no hay pobreza, significaría que la gente tendría empleo con buenos salarios que le garantizarían una calidad de vida que le permitiría su reproducción sin penurias y sin angustias. La pobreza es la peor de las guerras de la humanidad en contra de la humanidad misma; es el hecho atravesó del cual se manifiesta la violencia de la sociedad con toda su fuerza y, desgraciadamente, cada vez abarca un mayor número de habitantes que, por ello, reproducen la cultura del miedo.

El centro histórico- ciudad vieja, al paso del tiempo se ha convertido en objeto de recreación de esta pobreza endémica que se manifiesta en las características que toma el trabajo y su soporte material; pues históricamente las bases productivas de la ciudad han sido deficientes para responder a trabajos bien pagados y, por ende, para satisfacer las condiciones básicas de una buena vida para sus habitantes.

Javier Sicilia plantea que las necesidades de la gente surgen por el despojo de las formas tradicionales de vida que se hace por la intromisión del mismo desarrollo. Lo cual se viene a agregar al despojo originario colonial y se agudiza con la Independencia; pero no solo eso México en nombre del desarrollo, no solo ha destituido a la mayoría de sus habitantes de sus formas tradicionales de vida, sino que los hace objeto de persecuciones. La más evidente –señala Esteva- “Es la persecución a los vendedores ambulantes”.

No solo se les despojo progresivamente de una forma de vida digna, por lo que tuvieron que acudir a esta forma de comercio. Sino, también, se les hostiga y persigue, sin darles alternativas viables. Pesa sobre ellos la amenaza de una reforma fiscal que hará más penosa su persecución para integrarlos a in sistema que no les ofrece nada. Por ello, no es despreciable que, dentro de esta dinámica de incapacidad y escases, para un buena parte de sus habitantes, el centro haya constituido solamente un lugar para vivir sino, también, por lo menos hasta 1987, haya sido el asiento de su principal fuente de trabajo (48.9 %) y en los pocos casos en que existió una fuente secundaria de ingresos (6.2%), ésta también se ubica en esta parte de la ciudad.

Empleos inventados por la propia gente para

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