JUICIO ORDINARIO CIVIL
Enviado por Abodagacris • 2 de Octubre de 2014 • 3.334 Palabras (14 Páginas) • 265 Visitas
JUICIO ORDINARIO CIVIL
EXP.
C. JUEZ DE PRIMERA INSTANCIA CIVIL ( I )
EN TURNO.
P R E S E N T E
ALFONSO SALAS LOPEZ, mexicano, mayor de edad, por mi propio derecho, señalando como domicilio para oír y recibir toda clase de notificaciones el ubicado en FRANCISCO JUAREZ ESQUINA VALLE DE LERMA, despacho 1, primer piso de la Plaza Chiquita, primera sección de la Colonia Arboledas de esta Ciudad de Celaya, Gto., (II)autorizando para recibir las mismas aun las de carácter personal, recibir toda clase de documentos, tramitar copias simples y certificadas y consultar el presente Expediente al LIC. JOSÉ MANUEL BARAJAS SÁNCHEZ y a la C. GABRIELA GÓMEZ ZARATE, otorgando mandato judicial previa su ratificación en los términos de los artículos 2099 y 2100 del Código Civil vigente en el Estado y otorgando las facultades especiales que requieran cláusula especial al C. LIC. JOSÉ MANUEL BARAJAS SÁNCHEZ, ante Usted, con el respeto que le es merecido, comparezco a exponer:
Que en la VIA ORDINARIA CIVIL (III) y en ejercicio de la Acción de DIVORCIO NECESARIO, vengo a demandar a la C. TAMARA RUIZ MARTINEZ, quien tiene su domicilio en calle Alumbre número 220, de la Colonia San Juanico, de ésta Ciudad de Celaya, Gto., sobre las siguientes:
P R E S T A C I O N E S
1).- El DIVORCIO NECESARIO o DISOLUCION DEL VINCULO MATRIMONIAL que nos une por actualizarse la hipótesis jurídica prevista por el artículo 323, fracción XVIII, del Código Civil vigente en el Estrado.
2).- El pago de gastos y costas Judiciales que se originen con la tramitación del presente Juicio.
Fundo la presente demanda en las siguientes consideraciones de hecho y de derecho:
H E C H O S (IV)
1.- En fecha 1 primero de Abril de 1967 mil novecientos sesenta y siete, el suscrito contraje matrimonio civil con la C. TAMARA RUIZ MARTINEZ, tal y como lo justifico con la copia certificada del Acta de Matrimonio que me fue expedida por el C. Oficial del Registro Civil de ésta ciudad de Celaya, Gto., misma que se anexa a la presente.
2.- Bajo protesta de decir verdad manifiesto que el último domicilio conyugal que establecimos tanto la hoy demandada como el suscrito lo fue el ubicado en la calle Alumbre No. 220, de la Colonia San Juanico, de ésta ciudad de Celaya, Gto.
3.- De mi matrimonio con la C. TAMARA RUIZ MARTINEZ, procreamos 1 hijo de nombre Juan de apellidos Salas Ruíz, quien a la fecha bajo protesta de decir verdad manifiesto es mayor de edad.
4.- La relación matrimonial con mi cónyuge durante un lapso de 27 años aproximadamente fue normal y llevadera, esto es, con los altibajos económicos y emocionales que experimentan la mayoría de las parejas, sin embargo, nuestra relación se fue deteriorando motivado por la incompatibilidad de caracteres, lo que dio como resultado múltiples desavenencias que hicieron imposible la vida en común, llegando al grado a que de hecho nos encontramos separados desde aproximadamente a mediados del mes de julio de 1994. Esto es, aproximadamente a principios del mes de junio de 1994 cuando el suscrito me vi gravemente afectado en mi salud, pues sufrí un infarto y ello derivado de los constantes enojos que como producto de las diversas desavenencias tuvimos en común y una vez que fui atendido clínicamente y después de haberme estabilizado en mi salud, y siendo aproximadamente a finales del mismo mes de junio del año señalado, cuando le solicité a mi esposa que tomara una cantidad de dinero del que teníamos ahorrado y que nos fuéramos de esta ciudad de Celaya, Gto., a otra ciudad, cualquiera, que a lo mejor eso era o que nos hacía falta para seguir juntos y que le dejáramos todo lo que teníamos a nuestros hijos, diciéndole además que el suscrito de cualquier forma buscaría trabajo digno para poder mantenernos, a lo que recibí como respuesta por parte de mi esposa: “YO DEJAR A MIS HIJOS NUNCA Y MENOS POR TI”, por lo que le contesté que si no se iba con el suscrito de todas maneras me iba a ir, es decir, ya había tomado la decisión de abandonar el domicilio, pues ya no soportaba más conflictos con ella y que no quería que los referidos problemas agravaran mi salud; por lo que mi esposa me dijo en forma por demás tajante: “pues si ya decidiste irte, vete, pero no cuentes conmigo, yo no dejo a mis hijos”.
5.- Ante la conducta tomada por mi esposa, moralmente me sentí decepcionado por su falta de apoyo en esa decisión del suscrito, lo que originó que tomara las medidas para abandonar el domicilio conyugal y evitar todo tipo de confrontación con mi cónyuge, para lo cual primeramente deje de asistir con suma frecuencia a nuestro domicilio conyugal en tanto encontraba un lugar en donde poder vivir solo y pasado un lapso de tiempo aproximado de diez días y en vista de la nula relación con mi esposa y evitar conflictos mayores que repercutían en nuestros hijos, finalmente a principios del mes de julio de 1994 fue cuando abandoné definitivamente el domicilio conyugal, para no regresar nunca más, situación que a permanecido hasta la fecha.
En consecuencia, manifiesto a su Señoría, que a partir de la fecha señalada con antelación, el suscrito tengo de separado de mi esposa 13 trece años y 7 siete meses y durante todo este lapso de tiempo solamente he coincidido con mi esposa, en eventos sociales de mis hijos, al haber sido invitado por ellos. Sin embargo, durante todo el tiempo que he estado separado de mi esposa, siempre de contó con un apoyo económico de acuerdo a mis posibilidades, que el suscrito le enviaba a través de mis hijos, de acuerdo a mis posibilidades, dado que siempre he carecido de un trabajo estable, y ahora con mayor razón derivado de mis condiciones físicas que se han acentuado con mi edad, además de que mi esposa cuenta con el inmueble que fuera el domicilio conyugal y el cual es propiedad del suscrito, , razón por la cual se colmó uno de los elementos de los alimentos, amén de que cuenta con el apoyo de nuestros hijos en atención al principio de reciprocidad alimentaria.
6.- Es por tanto, que me veo en la necesidad de
...