LA GESTION EDUCATIVA

LIDERAZGO EN LA GESTION EDUCTIVA

DOCTORANTE

MANUEL RAUL JUAREZ LOPEZ

La gestión educativa precisa hoy en día de verdaderas acciones eficientes para obtener ventajas a futuro, ya sea de forma inmediata o mediata, por lo que se deben tener siempre presentes tanto los objetivos institucionales que se han definido, como las oportunidades y los desafíos que la misma institución esté presentando, por lo cual se deberá buscar provocar un compromiso de todos y cada uno de los actores inmersos en el desarrollo educacional con el fin de ofrecer el logro de competencias que conlleven a una conducción eficaz de los procesos educativos.

Al tener clara la misión institucional, así como la visión a futuro acerca de lo que se pretende lograr como parte de una colectividad educativa, se requiere de una nueva forma de pensar en torno a la gestión escolar, lo cual refiere sin duda alguna de lo que pudiésemos denominar como gestión escolar participativa, es decir que todos y cada uno de los integrantes de la comunidad educativa estén inmersos en los procesos hacia una verdadera educación activa que haga frente a la realidad, que retome la educación escolar a partir de ella y que en verdad provoque las transformaciones necesarias y deseadas, lo cual hace imprescindible que este presente en todo momento un liderazgo apremiante para quienes estén a cargo de los momentos y procesos.

Podemos entender por liderazgo a la forma eficiente y efectiva de ejercer el poder que se pudiese llegar a tener, a través del desarrollo de una serie de competencias que permitan conocer el entorno, manejar conflictos y saber comunicarse de manera práctica entre otras cosas, pero sobre todo, el saber trabajar en equipo de forma colaborativa mediante la motivación y la ética profesional como principales características esenciales en la gestión educativa.

Podemos decir por lo tanto, que un verdadero líder empieza por modificar sus conductas en base a las necesidades colectivas, sumando a todo ello la voluntad y motivación personal suficiente para lograr metas y objetivos comunes usando su empoderamiento, institucional o no, con responsabilidad y respeto tanto para si mismo como para todos los demás.

México ante los nuevos retos educativos.

Hoy en día, hay quienes efusivamente señalan que la verdadera clave para la prosperidad de nuestro país, es la educación, que el futuro de nuestra sociedad depende de saber actuar de manera conjunta y que tanto maestros, padres de familia, estudiantes y gobiernos tienen en sus manos la posibilidad de producir los cambios necesarios para que se logre una educación de excelencia que contribuya a generar nuevas y mayores perspectivas de crecimiento con igualdad de oportunidades para todos.

Al pretender el mejoramiento de una nación y propiciar su capacidad de competir internacionalmente, es innegable que se debe pensar en mejorar el nivel educativo, toda la evidencia indica de manera palpable que la calidad de la educación es clave para garantizar un crecimiento sustentable y que puede ser mediante la rendición de cuentas que los resultados de aprendizaje y mejoramiento del nivel educativo se logren presentar a un corto plazo.

En su informe a la UNESCO de la comisión internacional para el siglo XXI “La educación encierra un tesoro”, Jacques Delors (1996), presenta una propuesta la cual gira en torno a una serie de supuestos educativos, algunas realidades socioeconómicas del siglo XX y la influencia de una educación para toda la vida y durante todas sus etapas, encuadra el hecho de que algunos fenómenos marcan nuestro devenir histórico, donde la mundialización es uno de ellos, en el cual, el proceso de mundialización es algo inherente al avance científico y tecnológico; este avance en las nuevas tecnologías elimina las barreras y las distancias y nos introduce en la educación universal, la cual debe dar a los individuos la capacidad para dirigir sus saberes tendientes a la modificación de las relaciones interpersonales, para ello se deberán tomar decisiones en educación, empezando con procedimientos en los que los sistemas educativos presenten mejoras notables y donde los diversos actores trabajen más y mejor de manera inclusiva, donde los docentes vayan mas allá del simple acto educativo y se retome el liderazgo como algo compartido y común al interior de la comunidad educativa misma.

El liderazgo docente como parte de una visión institucional.

Actualmente, se pronostica que las IES incrementaran su capacidad de respuesta para atender las necesidades académicas según sea su estrategia y planificación encausada mediante una verdadera visión estratégica hacia estar preparadas para los cambios constantes que hoy en día se demandan en pro de fortalecerse con equilibrio entre calidad, eficiencia y equidad, por lo que el verdadero cambio vendrá a depender de un liderazgo académico innovador y de las virtudes del carácter que actualice dicho liderazgo educacional.

Van de Grift y Houtvee (1999), definen el liderazgo educacional como la capacidad de un director para iniciar el mejoramiento de las escuelas, para crear un clima educativo orientado al aprendizaje, además contempla que es necesario estimular y supervisar a los profesores, de forma tal que puedan llevar a cabo sus tareas tan efectivamente como sea posible.

Hoy en día es imprescindible denotar que no es posible concebir una dirección de un centro escolar sin un liderazgo efectivo, liderazgo que a sentir de Beltrán (1996), se puede visualizar como un proceso de transición de un liderazgo transaccional a un liderazgo transformacional donde se concibe una nueva condición social, la cual se comunica a los liderados con inspiración, carisma, estimulación intelectual y consideración individual, además de considerar la denominada tolerancia psicológica como una estrategia eficaz del liderazgo transformacional mediante la aceptación y apoyo de todos los integrantes de la colectividad, aun de aquellos que no llegaran a pensar de la misma manera o que tengan otros valores de acción para su vida .

Cheng (2011), presenta un escrito con este respecto donde retoma la temática del cambio en el liderazgo docente, con una reflexión acerca de la importancia de una modificación de paradigma, necesario para iniciar reformas significativas en la escuela y su aprendizaje, en un contexto de globalización, transformación económica y competencia internacional.

Comenta en su documento acerca de la ola de reformas educativas que tienen como objetivo mejorar los procesos internos de aprendizaje, la enseñanza, la gestión y la mejora de la eficacia interna de las escuelas en la consecución de objetivos previamente planificados y objetivos educativos del currículo.

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