La Respuesta A Los Conflictos

La respuesta a los conflictos.

La principal preocupación en las situaciones de conflicto no se dirigirá a ocultarlos, sino ha ver de que modo les hacemos frente. El provecho que podemos llegar a obtener depende del estilo de respuesta que adoptemos. Hay diversas formas de responder a las situaciones conflictivas, algunas de las cuales son poco adecuadas, mientras que otras suelen proporcionar resultados mucho mejores.

Las formas inadecuadas de responder a los conflictos vienen dadas por las aproximaciones pasivas y las aproximaciones pasivas.

• Las aproximaciones pasivas son aquellas que ante una situación de conflicto priorizan las respuestas de huida o bien de acomodación, pretenden evitar el conflicto por encima de todo.

También son aquellas respuestas que optan por acomodarse a las exigencias que impone la otra parte cuando ya resulta imposible desoír el conflicto. Con ello pueden lograr una paz superficial que suele esconder resquemor y que habitualmente acaba disminuyendo la propia felicidad.

• Las aproximaciones agresivas al conflicto son todas aquellas conductas que ante una diferencia de intereses o puntos de vista buscan el enfrentamiento y la competición con el ámbito de vencer. Las posturas agresivas desembocan en una espiral de violencia.

Si el buen sentido que atesoran de modo natural las personas no puede manifestarse y la respuesta al conflicto adquiere un estilo agresivo por ambas partes, se entra a una espiral conflictiva que tiende a incrementar el tamaño y la intensidad del problema, nadie quiere hacer nada y tienden a aparecer comentarios hirientes y amenazas.

Frente a estos estilos opuestos de respuesta a los conflictos, es posible imaginar un modo de enfrentarse a ellos que priorice la negociación o la cooperación. La búsqueda de formulas que permitan obtener beneficios a todos los implicados.

En el caso de la negociación supone acuerdo, pero no colaboración. Se alcanza un comportamiento de colaboración cuando la resolución de los conflictos se lleva a cabo de manera cooperativa. Se trata de buscar una solución que satisfaga simultáneamente a ambas partes.

La negociación y cooperación son estrategias que pueden usarse sucesivamente: primero se negocia un acuerdo y luego es posible ampliar el marco de coincidencias y empezar a colaborar.

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