La violencia en el jardín de niños

“La violencia en el jardín de niños”

Antes que nada es necesario definir la palabra violencia. Esta palabra es entendida como el tipo de interacción entre sujetos que se manifiesta en aquellas conductas o situaciones que, de forma deliberada, aprendida o limitada, provocan o amenazan a hacer daño o sometimiento grave (físico, sexual, verbal o psicológico) a un individuo o a una colectividad. Puede producirse a través de acciones y lenguajes, pero también de silencios e inacciones.

Ahora, ¿Cómo se da la violencia en los jardines de niños?

Como ya antes fue mencionado, la violencia no solo se da mediante daños físicos, si no también verbales, o psicológicos. Claro ejemplo de ello es lo que sucede en los jardines de niños, hablando de un sistema escolar.

¿Cómo se da esta violencia?

Los sistemas educativos son cómplices de los malos tratos, dándose así una violencia sistémica: Aquella práctica o procedimiento institucional que produzca un efecto adverso en los individuos o en los grupos al imponerles una carga psicológica, mental, cultural, espiritual, económica o física. También son aquellas prácticas que imposibiliten el aprendizaje de los alumnos, causándoles así un daño, aunque este daño no sea intencionado es aplicado por autoridades bienintencionadas que creen que las prácticas están al mejor servicio de los alumnos. Ejemplos de ello son:

La complicidad, las pruebas estandarizadas, la parcialidad cultural, el abandono de lo afectivo, el castigo, el control, la estandarización, etc.

Pero, este no es el único caso de violencia dentro de los jardines de niños, sino también el que se da entre los propios alumnos preescolares.

Dentro de un estudio llamado “Agresividad injustificada entre preescolares” de Rosario Ortega y Claire Monks. Los resultados de violencia son evidentes, pues se encontró que los niños pequeños eran más proclives a las formas agresivas verbales y físicas. Los varones fueron quienes se encontraron en un mayor índice de agresores, tanto por sus iguales como por los docentes. Las estrategias que las victimas de sus iguales utilizaban para afrontar la agresividad injustificada de sus compañeros fueron: decírselo a un adulto, devolver la agresión, pedir ayuda a un amigo, salir corriendo llorar y someterse.

Si ya se tiene en claro que en el jardín de niños existe una violencia, así mismo debemos tener en claro cuáles serían las posibles soluciones para prevenirla.

Conceptualizar la violencia en la escuela implica entender que la manifestación a la que nos referimos es la que se da en el espacio de las relaciones humanas en el contexto de las instituciones educativas.

Si se pretende algún cambio respecto a los fenómenos de violencia que se dan en los centros escolares, se tiene que considerar que diversas partes dependen de los docentes, y no solo del contexto

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