Las Culturas Juvenilines

Las Culturas Juveniles en México.

Nunca había reflexionado ni me había documentado acerca del por qué, de la existencia de las bandas juveniles que por cierto hay demasiadas de ellas. Después de analizar estas lecturas me doy cuenta que es un tema muy interesante y hasta me crea un cierto conflicto existencial, ya que hablamos que vivimos en un país donde todos son iguales y existe la democracia, pero ya en la práctica ellos están marginados de una participación social activa. Las autoridades o gobiernos saben de ellos y de su reclamo social pero es poco el interés que les dan, ya hasta que ellos se hacen sentir, es cuando toman cartas en el asunto, …reprimiéndolos. Pocos o insuficientes son los recursos que destinan a este tipo de población para que puedan progresar.

Todas estas bandas comparten en cierta forma la misma ideología o el mismo fin, que es hacerse notar mediante la” unidad”, creen que todos juntos lograran sus objetivos cualesquiera que sean. Son muchos y cada cultura se quiere distinguir unos de otros usando nombres que llamen la atención ( por lo extraña o poco usual o lo agresivo que se escuche) por su tipo de vestimenta, peinado o accesorios y hasta forma de hablar que los diferencia.

Son jóvenes carentes de identidad, y sus condiciones sociales y económicas los han obligado a tomar esta postura, se esfuerzan tratando de llamar la atención a la sociedad (la mayoría de ellos por medio de la violencia, generando pánico) para que sepan que existen y sienten la represión que se ejerce en ellos por no tener las mismas oportunidades que muchos de esos jóvenes deberían tener a su edad.

La mayoría de estas bandas se comenzaron a formar en las fronteras y en los estados unidos, como resultado de la marginación o del rechazo social que vivieron sus padres o familiares que trabajaban en ese país.

De la creación de estas bandas han derivado otras, algunas de ellas se conocen que han sido nefastas y destructivas, pero también hay otras que han tomado un lado amable y tranquilo. Me llama la atención las bandas de cd. Neza que antes eran autodestructivos y cuando ocurrió el temblor del “85, cambio la perspectiva de las banda y se dedicaron a ayudar a todo aquel que los requería.

Me da como conclusión, que la nobleza humana es mayor, que cuando vemos la desgracia, crece ese sentimiento de ser útiles y ofrecer ayuda a todo aquel que lo necesita sin importar las clases sociales. En ese instante ahora si todos somos vulnerables ante los caprichos de la naturaleza.

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