Las consecuencias de ser irresponsables
Enviado por karlos3124 • 26 de Octubre de 2014 • Tesis • 1.123 Palabras (5 Páginas) • 325 Visitas
Las consecuencias de ser irresponsables
Es de suma importancia erradicar la irresponsabilidad de nuestras vidas, si no queremos que sus consecuencias nos alcancen.
La irresponsabilidad, es por todos muy bien conocida. Aún y cuando desconozcamos su significado, la practicamos, y jamás escapamos del resultado de actuar de forma irresponsable: llegar tarde a un compromiso, hacer las tareas a destiempo, o elaborar cualquier trabajo o tarea doméstica a último minuto, esperar hasta que el plazo de efectuar un pago nos alcance, no terminar con un proyecto o dejar uno a medias, sacar calificaciones mediocres… todo esto no refleja otra cosa más que nuestra irresponsabilidad.
Podemos justificarnos de mil formas: no tuve tiempo, se me hizo tarde, me desvelé, se me olvidó, tuve otros gastos, son tantas mis ocupaciones, los niños, la escuela, la comida, mi esposo, el perro…sin embargo, nada justifica en realidad el actuar de forma irresponsable; no existe una razón de peso por la cual nuestra imagen sea denigrada por actuar irresponsablemente, o ¿sí? Pero, ¿qué es la irresponsabilidad? Según el DRAE, Irresponsabilidad es: cuando una
persona actúa de forma descuidada, falta de cuidado o de compromiso, también es falta de aplicación; por el contrario, Responsabilidad es: Cuidado, esmero en ejecutar algo, agilidad, prisa.
Es muy común para nosotros los mexicanos actuar irresponsablemente, hasta elaboramos chascarrillos de muy mal gusto para justificarnos: se me pegaron las cobijas, ¡ups!, no me regañes, me puedo traumar, ¡¿Qué?! Así somos los mexicanos ¿Qué, no?, ¡nomás tantito!, ¿a poco era para hoy la tarea? discúlpenme, surgió un imprevisto, y por eso no tuve tiempo de terminar, ¿una hora después? típico de los mexicanos… y, de forma cínica creemos que con una sonrisa y un disculpe solucionamos la situación; cuando, deberíamos de forma seria reconocer nuestro descuido, y cambiar de forma de actuar, es decir, aprender de nuestros errores o de las humillaciones y vergüenzas que sufrimos a causa de nuestra irresponsabilidad; pero, la mayoría de nosotros, con el paso del tiempo aprendemos nuevas formas para salir airosos de una situación provocada por uno mismo, o vamos adquiriendo una capacidad de permanecer estoicos ante cualquier llamada de atención o humillación, (se nos va formando una concha bárbara); es triste pero es la más pura realidad.
Los hijos de Dios, deberíamos ser ejemplo de todos de diligencia(sinónimo de responsabilidad, no de irresponsabilidad; dice La Escritura en la 1ª epístola del apóstol Pablo a Timoteo: sé ejemplo… en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza; estoy segura,
que en esta Palabra, Dios nos exhorta a actuar responsablemente, no solo para nuestro bien, sino, para que otros puedan seguir un buen ejemplo; detrás de nosotros vienen algunos, o muchos que observan nuestro actuar, aún y cuando no provoquemos tal cosa; La Palabra declara, que somos cartas conocidas y leídas por todos los hombres, de forma aún mas clara en la misma Epístola a Timoteo, pero en el capítulo dos, verso quince dice: procura con diligencia (responsabilidad) presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de que avergonzarse…¡que terribles estragos causa nuestra irresponsabilidad! No nos preocupemos de la imagen que los demás tienen de nosotros; pero si debería importarnos cómo nos mira Dios, a Él no lo podremos engañar nunca, aún y cuando nos esforcemos por decirle a Dios todas nuestra razones y circunstancias; El nos conoce, sabe todo sobre cada uno, conoce a la perfección
...