Liderazgo En Alta Gerencia
Enviado por Isbella • 17 de Noviembre de 2012 • 641 Palabras (3 Páginas) • 1.215 Visitas
El liderazgo en la alta Gerencia Educativa.
El Gerente Educativo, está al servicio de su comunidad, liderará su actuación convirtiéndose en guía del desarrollo, símbolo de acción y valores humanos, forma de organización educativa consolidada de autorrealización y autogestión con una formación integral de sus miembros y de alta autoestima, estimulando los nobles principios de honradez, nobleza, generosidad, prudencia, paciencia, solidaridad con el fin de que responda a los intereses del plantel y obtener el apoyo de todos en las tareas institucionales.
El valor moral, la fuerza de los principios humanos convierte al líder de Alta Gerencia en un motivador
de su grupo, en el elemento vital de la acción y
Transformación social de su medio, lo cual significa
un poder de convicción ética para alcanzar las metas
Superiores y romper estructuras que beneficien a su colectividad.
La vocación de trabajo es el atributo de todo líder de alta gerencia educacional, impulsa ideas creativas en pos de mejorar las condiciones del hombre es decir, “EL LÍDER SE JUSTIFICA POR EL TRABAJO QUE REALIZA EN BIEN DE LA HUMANIDAD”; no existe límites de tiempo en sus labores ni lo detiene obstáculo alguno, está dispuesto al sacrificio por la institución y ama su trabajo como un don divino del hombre.
El líder educacional busca la excelencia en su trabajo, como una necesidad de eficiencia y seguridad institucional en la formación de los profesionales que respondan al siglo XXI, la potencialidad de hacer las cosas bien hechas que signifiquen la satisfacción personal y social dentro de una tarea planificada.
El equipo de trabajo contribuye a fortalecer el liderazgo en Alta Gerencia Educativa, pues una sola persona no puede realizar toda la labor institucional, necesita de la contribución social de muchas personas para llevar una obra debidamente planificada, al compartir funciones y delegar atribuciones, se siembran precedentes de confianza y honor en el proceso de una tarea, el esfuerzo mancomunado lleva al triunfo.
El epíritu de competencia es el instrumento permanente de apoyo junto con la crítica y la auotcrítica, la asimilación constante de conocimientos, la preparación científica, perfección en sus destrezas administrativas y habilidades en la resolución de conflictos, es decir, estar listo siempre a propósitos de crear el bien en la sociedad.
La firmez de convicciones positivas da un fundamento de seguridad, estabilidad, honorabilidad, honradez, cabellerosidad y tolerancia convirtíendose en un sólido conjunto de virtudes y políticas educativas, que fortalecen los prin cipios institucionales, le toca enfrentar los retos que nos trae este mundo cambiante por la ciencia y la alta tecnología.
“EL LÍDER DE ALTA GERENCIA EDUCATIVA MANTIENE UN ESPÍRITU DE FILOSOFÍA, ORGANIZACIÓN, ACCIÓN, PRÁCTICA, CREATIVIDAD, COMPETENCIA,
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