Los amuletos son objetos a los cuales de algún modo les son atribuidas ciertas características sobrenaturales. El significado de la palabra amuleto según la real academia española

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Bárbara Barbosa

Habilidades del Lenguaje

Monografía

La Mano De Fátima

Los amuletos son objetos a los cuales de algún modo les son atribuidas ciertas características sobrenaturales. El significado de la palabra amuleto según la real academia española^[1] dice relación con un objeto pequeño que se lleva encima, al que se le concede la virtud de alejar el mal o propiciar el bien. Son utilizados frecuentemente para atraer la buena suerte o asegurar la protección de sus dueños, y pueden ser desde joyas hasta oraciones en algunos casos. Hay que destacar, que poseen una larga data al ser uno de los objetos con mayor antigüedad dentro de la humanidad, ya que en ellos se percibió la posibilidad de escapar de los diversos males que los aquejaban siendo estos daños físicos, morales e incluso espirituales. En un principio, los amuletos eran elementos propios de la naturaleza como piedras o cristales, que de algún modo eran valorados por su rareza. Luego, fueron adquiriendo mayor complejidad al ser asociados a religiones o diversos episodios  históricos que invocaban buena fortuna. En la actualidad, podemos encontrar una infinidad de amuletos^[2] dentro de los cuales algunos de los más conocidos son la medalla de San Benito, las pirámides, las herraduras, las estrellas, los gnomos, las monedas chinas, los palos de canela, los maneki-neko o gatos de la fortuna, los elefantes, las patas de conejo, y la Jamsa o mano de Fátima. Es importante entender que el uso de estos amuletos no se limita a las regiones ni culturas de origen, esto se debe a un fenómeno de globalización de los mismos.

La Jamsa o mano de Fátima^[3], al ser uno de los talismanes más comunes, es posible encontrarla en accesorios, imágenes e incluso tatuajes como producto de una moda, al igual que muchos otros amuletos. Sin embargo, muchas veces no se tiene la noción del por qué se encuentra tan presente como ícono dentro de nuestra sociedad. Por lo tanto, no está demás el preguntarse sobre su origen, contenido, y el significado asociado a tal imagen, a modo de darle un real sentido. En primer lugar, debo señalar que este amuleto tiene una larga trayectoria, siendo un símbolo tradicional dentro de las culturas musulmanas y judías, en las que posee un mismo significado; el "cinco"^[4]. Dicho amuleto, también es conocido como "la mano de Dios", proviene desde la antigüedad y se puede apreciar en la iconografía judía ya a partir del año 244 D.C en los frescos parietales de la Sinagoga de Dura Europos en Siria, y desde 518-527 D.C. en los mosaicos que Marianos y Janina realizaron en la Sinagoga de Beit Alfa en Galilea, Israel^[5]. Dentro de sus propiedades como amuleto, la mano de Fátima ha sido señalada como una protectora del mal, de hecho hay quienes sostienen que es capaz de detener el mal con su palma, y al mismo tiempo, tiene la capacidad de prevenir diversas enfermedades, y atraer la buena suerte.  Por lo tanto, mi obejtivo será entregar la mayor información posible en torno a este ícono, para revelar aquellos misterios detrás de este talisman.

El relato^[6] en torno al origen del amuleto, cuenta que el profeta Mahoma, fundador del Islam, tuvo una hija llamada Fátima. Se cuenta que en una ocasión esta se encontraba muy ocupada en la cocina preparando la comida cuando su marido, Alí, llegó inesperadamente.  Al oírlo, Fátima abandonó por un instante sus quehaceres y fue a recibirlo. Sin embargo, quedó profundamente decepcionada al ver que su esposo llegaba acompañado de una bella y joven concubina. Prudente, Fátima guardó silencio y, atormentada por los celos, regresó a la cocina. Pero, inmersa en oscuros y tristes pensamientos, no prestó atención a lo que se encontraba haciendo. En aquel momento tenía una olla al fuego con caldo hirviendo y, más atenta a su tristeza que a su trabajo, metió la mano dentro y empezó a remover el guiso. Tan absorta estaba que no sintió dolor alguno, pero Alí vió lo que estaba haciendo y, horrorizado, se abalanzó sobre ella gritando, fue entonces cuando Fátima se dio cuenta de que se estaba quemando la mano y la sacó de la olla. Desde entonces el relato de la mano de Fátima se volvió un símbolo importante dentro del mundo musulmán.

Paralelamente al popular relato mencionado anteriormente, existen otras narraciones para establecer el origen de la mano de Fátima^[7].  El primero de estos, dice relación con que los discípulos de Mahoma, profeta y creador del Islam, se quejaron por la supresión de los símbolos religiosos, recordando que ellos no pueden hacerle culto a objeto alguno, al saber esto Mahoma se mojó los dedos en tinta, luego los marcó en unas hojas de papel, se lo enseñó a quienes le seguían y quedó esto como un acuerdo. La siguiente historia habla de que tras la guerra de El Bedr Hanim, le dieron a la hija de Mahoma, Fátima, para que su credo no tuviera ningún emblema. Fátima se mancho la mano con la sangre de los heridos y manchó su velo. Otra versión^[8], escuchada únicamente en la región de Chaouen cuenta que cuando el esposo de Fátima, Alí, se disponía a ir la batalla, ella le impuso su mano y rezó fervorosamente por él para protegerlo durante la contienda. Una vez finalizada la batalla, al salir felizmente victorioso, Alí comprendió que había sido la mano de su esposa, la que a través de su bendición lo había protegido, resultando milagrosamente ileso. 

La Jamsa o mano de Fátima^[9], es representaba por la palma de una mano abierta de carácter simetrico, en la que aparece el dedo del corazón en el centro, a sus lados el anular y el índice, un poco más cortos que el corazón e iguales entre sí, y en los extremos aparecen dos pulgares del mismo tamaño, con una curvatura hacia afuera. También es posible encontrar dicha imagen asociada a otros símbolos, como el ojo de Dios en el centro de la palma, o inscripciones de carácter religioso. Como he señalado previamente, Jamsa o Hamsa significa cinco. Dentro del mundo musulmán^[10], los cinco dedos estan vinculados a los cinco pilares de la religión musulmana, los cuales son la shahada o fe, la oración o azalá cinco veces al día,  la limosna o azaque,  el ayuno o sawm en el sagrado mes del Ramadán, y la peregrinación a la Meca al menos una vez en la vida. Mientras que, en la tradición hebrea^[11] la palabra hamsa también adquiere un sentido sagrado. Precisamente, son cinco los libros sagrados de la Torá, al mismo tiempo, la quinta letra del alfabeto hebreo, Heh, es uno de los nombres sagrados para designar a Dios.

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