Marco Jurídico Para Paz

¿Es conveniente para el país en este momento iniciar negociaciones de paz?

Es tan conveniente como esperanzador iniciar de nuevo un proceso de paz para embarcar al país hacia  el fin del conflicto armado que durante 60 años le ha afectado en grandes proporciones. En donde ninguna de las partes ha salido vencedora, pareciera ser que solo se han logrado incrementar los índices de víctimas civiles inocentes, de muerte, de pobreza y de desplazamiento en el territorio nacional.

Si bien es cierto que se han vivido fallidos procesos anteriores, esperemos sirvan como espejo antecedente para fortalecer la presente negociación y de esta forma se evite incurrir en los errores del pasado.

Aunque muchos podrán  concebir utópica la idea de la paz, y tal vez sea un factor distractor para llamar la atención, verbigracia –alejar miradas de procesos como las concesiones mineras a ciertas elites multinacionales-, se hace de vital importancia que la sociedad colombiana asuma un compromiso y juegue un papel activo en el transcurso de este anhelado proceso.

Nadie ha dicho que sea un camino fácil de recorrer, sin embargo se ha iniciado de manera organizada, evidenciándose en estructurada agenda de negociación que ha sido diseñada y estudiada minuciosamente por lo menos desde hace seis meses, así:

1. Política de desarrollo agrario: destacándose la gestión encaminada a llevar desarrollo hacia las regiones más apartadas y reducir la miseria en el campo.

2. Participación política: buscaría fortalecer la participación a nivel nacional, regional y local de los grupos vulnerables, pero ¿que podría exigir la otra parte en caso de la participación de los posibles desmovilizados? ¿Hasta donde podrá ceder el gobierno?

3. Fin del conflicto: en donde se es puntual hacer un alto al fuego y a las hostilidades de forma definitiva; entrega de armas y reincorporación de las Farc a la vida civil en lo económico, lo social y político, de acuerdo con sus intereses. (No debe prevalecer el interés particular)

4. Drogas ilícitas; recuperación ambiental de zonas afectadas por el narcotráfico, solución del fenómeno de producción y comercialización de las mismas.

5. Victimas: punto definitivo y álgido, que procura por la verdad, justicia y reparación de las mismas. Siendo de importancia su ejecución, para garantizar la vida en comunidad entre las partes involucradas en el conflicto.

Así pues, un marco jurídico desarrollado de manera unilateral no sería suficiente a nuestro humilde saber y entender, esto, teniendo en cuenta que un proceso de mutuo acuerdo no puede desconocer los intereses de sus partes y, que si bien existe un ápice de voluntad en la organización rebelde para someterse al poder del Estado, este, no puede desconocer que los intereses guerrilleros podrían ir más allá de una simple reinserción a la vida civil.  

Consecuentemente, y en el

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