Principales Fracturas Ideologicas En España

Principales fracturas ideológicas en el sistema político español:

Fractura ideológica: ruptura de una ideología común en un territorio concreto; implica la pérdida del ideario colectivo y produce la escisión del grupo llevando a ideas que NO coinciden y a la consecuente colisión entre ideologías. Para analizar las fracturas de hoy en día en nuestro entorno recorreré brevemente la historia del SOCIALISMO DEMOCRÁTICO (PSOE) y la ideología CENTRO REFORMISTA del PP.

Del socialismo democrático al liberalismo conservador:

El socialismo democrático representado principalmente por el PSOE se caracteriza por “''una organización política de la clase trabajadora y de los hombres y mujeres que luchan contra todo tipo de explotación, aspirando a transformar la sociedad para convertirla en una sociedad libre, igualitaria, solidaria y en paz'' que pretende ''contribuir a alcanzar una sociedad mejor, detectando los problemas y aportando soluciones, sobre la base de los principios de libertad, igualdad, solidaridad y justicia social.

Para entender de dónde vienen estas bases retornamos a la influencia de los principios de la Revolución Francesa (1789) de deseos de libertad, igualdad y fraternidad. Los socialistas comienzan buscando la “satisfacción de necesidades humanas”: priorizan el interés de la comunidad y reivindican “un control democrático efectivo de la economía…planificarla en función de las necesidades humanas”. Son fuertes impulsores del estado de bienestar. Para ellos el Estado y los medios de producción deben ser colectivos (influidos por Karl Marx y su defensa del Estado como órgano con grandes facultades para la toma de decisiones referentes a la economía donde los propios trabajadores administrarían sus bienes y controlarían las instituciones políticas a través de mecanismos democráticos)

El socialismo en España representado mayoritariamente por el PSOE ha ido evolucionando y atravesando procesos de cambio, pero logra especial protagonismo desde la II República y, aunque pasa por los convulsos años de la Guerra Civil y Transición, llega a nuestros días como uno de los dos partidos mayoritarios dentro de un sistema bipartidista.

A la vez que esta ideología evoluciona y se abre paso en el panorama actual, encontramos enfrentada la figura del Partido Popular, quienes considerándose de ideología liberal conservadora, nacen gracias a la herencia de Alianza Popular fundada por Fraga en 1976. El partido progresa a lo largo de los años, separándose en cierta manera del nexo franquista, hasta que en 1989 se forma el nuevo partido ''centro reformista''.

El liberalismo hace referencia al “individuo dotado de unos derechos y dignidad intrínsecos. Y a una concepción subordinada del Estado en la que su fin primordial es la protección de los individuos”. Aunque el liberalismo conservador consista en una “variable poco racionalista en su discurso, moderada y prudencialista en cuanto al cambio social”. El Estado es necesario, pero no se encarna en el seno de la sociedad, sino que es un instrumento para garantizar el orden social y conservar el equilibrio de la vida colectiva.

En cuanto a la dimensión económica “conviven tanto quienes enfatizan que el mercado sin restricciones puede tener efectos perturbadores sobre el tejido social, como quienes sostienen que el derecho de propiedad individual no debe ser transgredido en ningún caso” Después de todo esto es bastante evidente que la cuestión social no ocupa un lugar primordial dentro del liberalismo conservador.

El Partido Popular español quizás no se sienta totalmente representado por ese ideario, sin embargo no es posible analizar la fractura ideológica que existe en España si no tenemos en cuenta de dónde proceden estos valores enfrentados.

Un enfrentamiento histórico:

En nuestro país ha habido un enfrentamiento histórico que motivó aún más la fractura ideológica; una lucha continúa entre distintas doctrinas que cobra especial relevancia durante los años de Alfonso XII y el turnismo; la dictadura de Primo de Rivera (1923), la II República y la Guerra Civil. Estos momentos históricos han dejado consecuencias en el inconsciente de la población española dando lugar a una democracia dividida. Al haber existido una Guerra Civil reciente las heridas siguen abiertas en la población y serán difíciles de cerrar. Hacen que se hable de bandos y de etiquetas, de la necesidad que sienten los individuos por identificarse políticamente con una de las opciones o, aunque no sea en su totalidad, manifestarse de acuerdo con las ideas de aquellos que les resulten más cercanos. Fruto de la educación, las vivencias, los valores, el entorno o muchas otras circunstancias de la vida, las personas acaban formando parte de un colectivo que configura una de las opciones mayoritarias.

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