Reportaje Radiofonico

El reportaje es el género más rico de los usados en radio desde la perspectiva informativa. No tiene una estructura rígida, lo que le da una gran libertad creativa al profesional, aunque nunca debe olvidar que se trata de una narración de carácter informativo.

A pesar de esta ausencia de dogmas rígidos a la hora de elaborar un reportaje radiofónico, sí que existen unas pautas a seguir.

Por ejemplo, sí es verdad que en radio podemos encontrar reportajes simultáneos, que se realizan en directo y la creación se ejecuta paralelamente al desarrollo de la acción reportajeada. Pero lo más habitual es encontrarnos con reportajes en diferido, que permiten el montaje.

Para elaborar un reportaje debemos seguir una serie de pasos

Producción

Llamamos trabajo de producción al primer paso que debemos dar frente a cualquier tipo de pieza radiofónica interpretativa o informativa. Se trata de hacer las gestiones y llamadas oportunas para concertar una cita con los que serán los protagonistas de nuestro proyecto radiofónico y del que recogeremos información.

Volcar el bruto

Una vez concertada y hechas las entrevistas, volvemos a la emisora con el bruto y lo volcamos. "Volcar el bruto" es una expresión que se escucha continuamente en una emisora de radio. Se trata de importar a la computadora la totalidad de audio que se ha grabado. Y es que una vez esté todo el sonido en la PC podremos comenzar a trabajar.

Estructura

Aunque podamos darle una estructura típica de entrada, desarrollo y cierre; realmente en un reportaje las posibilidades son tan amplias como su creatividad lo permita.

Lo que sí es importante es que el reportaje comience con la locución del periodista; es decir, la entrada debe comportarse como una noticia radiofónica.

En este momento es muy importante llamar la atención del oyente. Para ello, hay muchas alternativas: podemos abrir con una especie de sumario, con el dato más sorprendente, con una descripción colorista o geográfica, con una situación chocante, etc.

Para sorprender, nos podemos ayudar de la música o de la inserción de efectos sonoros y de la interpretación que le dé el locutor

La redacción

En el reportaje, debemos escribir para quien oye. Por eso es preciso apelar a la claridad.

La claridad enunciativa aconseja la frase corta, sencilla y que tienda a la estructura lógica, la voz activa, el empleo de la redundancia y el estilo directo basado en apelar al oyente. Eliminar también la perífrasis, el elemento superfluo, la muletilla estilística, la oración subordinada y el abuso de complementos. En la locución, nos esforzaremos además por vocalizar y articular todos los fonemas de cada sílaba y todas las palabras de la frase, adecuar nuestra voz al carácter general del programa, dar sentido a lo que lee y leer con ritmo pero no a gran velocidad.

La claridad

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