SERVICIO AL CLIENTE

LA COMUNICACIÓN

En una de tantas ocasiones que se nos presentan en la vida donde la comunicación no es exitosa me ocurrió lo siguiente:

Se me habían asignado unas labores que debía hacer de manera cotidiana como parte de mis funciones, yo las realizaba a mi manera creyendo que estaban bien, creyendo que esa metodología utilizada era la que le agradaba a mi jefe.

En una ocasión ella llegó y comenzó a contarme un caso de una empleada anterior la cual hacía cosas que a ella no le gustaban y además no quedaban bien, lo cual la obligaba a ella a repetir tales labores y que esto era muy agotador. Le dije que si alguna vez había hablado con dicha empleada para exponerle la situación y me contestó que lo que esperaba era que ésta persona se diera cuenta por si sola de lo que ocurría para evitar disgustos y malos ratos, pues ella con la actitud que tomaba era muy obvia por lo cual la empleada debía notarlo.

Eso quedó así y los días pasaron sin mayores cambios.

Un día por casualidad al pasar por la cocina de la oficina la escuché hablando del tema con una compañera; me detuve con cuidado y pude notar que la persona a la cual hacía referencia era a mí, ¡qué situación más incómoda!

Si ella me lo hubiera dicho personalmente, momentos como este se habrían evitado, ella no seguiría estresada y yo hubiera mejorado mi desempeño y habría hecho las cosas de acuerdo al parecer de ella y sin afectar mi trabajo ni el de mi jefe.

Medité en lo que estaba ocurriendo y me decidí a hablar con mi jefe para conocer sus expectativas y así solucionar la dificultad que se estaba presentando. Al comienzo fue un poco difícil pero después de haberla escuchado comprendí que era lo que ella esperaba de mi trabajo al igual que ella entendió cuál era la metodología que yo utilizaba y el porqué de esta.

Fue así como nos pusimos de acuerdo y a partir de ese momento el trabajo se hizo más ameno y fructificante.

Comentarios

• Lo que falló desde un comienzo fue que nunca hubo comunicación entre nosotras y por eso desconocíamos lo que la otra persona deseaba.

• Faltó diálogo.

• Los mensajes indirectos no siempre se entienden de la manera que uno espera.

• La mejor manera de resolver los conflictos es comunicando de manera clara y objetiva las inconformidades y de esta forma y a través del diálogo lograr que los demás entiendan lo que nosotros queremos decir y porqué lo decimos

...