Seguridad Y Riesgo

La seguridad

de la empresa

Recientemente tuve el gusto de dar una amena charla con los gerentes de recursos humanos de las empresas más flamantes de México. ¿El tema? La adecuada selección del personal como un acto para la seguridad de sus empresas. La seguridad y la selección de personal, ¿tienen relación? Espero que no haya quedado la menor duda.

La sede fue en un edificio impresionantemente protegido y dotado de la más alta tecnología en seguridad patrimonial: diversos monitores conectados a cámaras de vigilancia, así como acceso electrónico de visitantes con identificación oficial (se está estableciendo como protocolo solicitar al visitante únicamente la credencial de elector o el pasaporte para permitir el acceso a los inmuebles; desde luego, no se obtienen beneficios en seguridad y solo se logra fastidiar a los usuarios).

El hermoso edificio con lindas oficinas estaba transformado en un fortificado bunker en el que pareciera que los guardianes custodiaban el Pentágono o un centro penitenciario de alta seguridad; todo orgullosamente exhibido a la vista del público como mensaje intimidante para el visitante: “Todos tus movimientos están vigilados; no intentes afectarme”.

Recordé cuando en una ocasión asistí a la Secretaría de Seguridad Pública Federal y una tímida recepcionista me dio un pegote equivocado para ingresar. Se olvidan mis amigos administradores de la seguridad que ésta debe de ser lo más discreta posible, generando las mínimas molestias a las personas, sin dejar de ser eficiente. No es necesario mostrar el tanque de guerra para sentirse protegido.

De paso, señalamos otra equivocada función que muchas empresas atribuyen al personal de vigilancia: los convierten en “recepcionistas”, actividad que por el perfil natural que generalmente tienen, desde luego no realizan adecuadamente la encomienda, y se limitan a decidir de acuerdo a su personal criterio quién entra o quién no. Es la empresa la que tendrá una afectación en su imagen y en su necesaria interacción con su mundo exterior.

Volviendo al primer punto, al comentarles a nuestros amigos gerentes de recursos humanos que la seguridad del edificio sede de nuestro anfitrión sólo lucía como una impresionante fachada protectora, pero que verdaderamente la seguridad no estaba ahí sino en sus áreas de trabajo, inicialmente percibí una reacción de sorpresa, que se transformó en interés y en ideas coincidentes.

¿Cómo obstruir el ingreso a la empresa de un excelente ingeniero satisfactoriamente graduado y que posteriormente se transformará en un “hacker”, o de un esplendido profesional en química que espera la oportunidad de sustraer las fórmulas de una empresa farmacéutica que representa millonarias ganancias, o un bien plantado empleado de un banco dispuesto a sustraer información confidencial? ¿Cómo detener a los empleados desleales?

Les cuestioné si esa magnifica protección de nuestro edificio sede podría hacerlo. ¡Claro que no! Sólo podrían hacerlo ellos: el reclutamiento y la selección de personal es el filtro de futuros empleados desleales. Su función es incorporar a personas con el perfil adecuado y en condiciones mentales y físicas optimas para el puesto, con sólidos valores de honestidad, probidad, lealtad, etcétera.

El área de reclutamiento es la más importante y la primera en el sistema de seguridad de la empresa; al seleccionar a buenos elementos, se previenen futuros quebrantos.

Ese precisamente es el problema de nuestras policías municipales, estatales y federales: no hay una adecuada selección del personal, por eso reclutan en muchas ocasiones a verdaderos delincuentes. En la actualidad muchos policías están sirviendo a los intereses de la delincuencia.

¿Cómo llevar a cabo una adecuada contratación? Les ofrecí mi punto de vista: durante el proceso de evaluación en el que se aplica la batería de pruebas psicológicas y psicométricas, debemos de tomar en cuenta factores endógenos y, posteriormente, los factores exógenos del candidato.

En la realización de conductas ilícitas en las empresas, generalmente están presentes tres elementos (ver El factor humano como riesgo, ENTORNO, Diciembre 2004):32 ENTORNO

• Tiempo prolongado en la institución y/o el puesto

• Salario bajo y estático

• Momento critico

Considerando

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