Tabú de los medios de comunicacion

Amarillismo, el tabú de los medios de comunicación.

TABÚ: conducta moralmente inaceptable por una sociedad, grupo, humano o religión. AMARILLISMO: tendencia de algunos medios informativos a presentar las noticias destacando sus aspectos más llamativos, aunque sean secundarios, con el fin de provocar asombro o escándalo. Problemática que surge a partir de la necesidad de que los medios de comunicación alteren o distorsionen la información para obtener una buena nota o una primera plana, volviéndose así participe indirecto de la violencia y corrupción, que ha restado legitimidad a la veracidad de la información, siendo un tema que, aun causando la obvia controversia, ha sido ignorado durante muchos años.

Es de vital importancia que los medios de comunicación miren objetivamente el espejo de la realidad,  con el cual, sea posible la paulatina recuperación del sentido y orientación de lo que se intenta transmitir, para que contribuya en el desarrollo de la ciudadanía basada en la paz, ética, integración e independencia. Con estas prácticas, se le ha dado la espalda a la realidad por el simple posicionamiento entre la ahora extensa cadena de medios de comunicación masiva, perdiendo cierto grado de técnica y ética enfocada a la comunicación, con la cual se ha dejado atrás el profesionalismo que envuelve a esta herramienta dedicada al enriquecimiento y crecimiento de nuestra cada vez más complicada sociedad.

Toda esta impresión generada en el informado, está fundamentado en los constantes escándalos y reprimendas en la información en los que día con día estamos involucrados, de los cuales, es difícil que por el manejo de la información que ha generado dicha mala fama, confiemos ciegamente;  es importante señalar que ningún medio de comunicación (radio, televisión, internet etc.) está exento de lo que nos abordó a este tema, siendo la falta de valores una causante primordial de esta problemática, alimentado por la corrupción de nuestros gobiernos que de antemano sabemos que es la madre de este tabú, donde hay fuertes cantidades de dinero o prestigio de por medio, con la finalidad de ocultar o resaltar información que saquen a la luz información sin sentido o con uno totalmente diferente a lo que se intenta transmitir.

A los medios de comunicación se les puede atribuir primeramente la ignorancia sembrada en las cabezas e ideologías de los ciudadanos conformistas, así como la violencia que incita  a los televidentes a seguir patrones de comportamiento de los criminales; sirviendo además como medio de distracción que convierte a sus audiencias en vegetales pasivos adictos al entretenimiento barato y sin fundamento, sin embargo viéndolo desde otro punto de vista nos podemos dar cuenta que los medios de comunicación van más allá de entretener.

Realmente tenemos un concepto confuso de lo que hacen los medios masivos ante los problemas sociales, ya que cuando se pide una opinión sobre lo que se piensa de los medios de comunicación, unos  podrían estar a favor justificándolo como un pasatiempo inofensivo, mientras que por otro lado, otros creen que es una peligrosa imagen del mundo real; por ende  la información impartida a los televidentes debería ser veraz, realista e integradora para poder recuperar esa objetividad con la que éticamente debería de manejarse dicha información. En los medios utilizados en la actualidad se puede hacer notar que se dan a conocer notas con lenguajes muy llamativos para atraer la atención de receptor y dejar ocultas verdades que realmente serian importantes para poder formular un cambio en la sociedad.

“El cuarto poder” como fue bautizada, poco antes del periodo de la Revolución Francesa, a la prensa por la extraordinaria influencia que ejercía sobre sus lectores antes de la aparición de medios como la televisión y la radio, ha sido objeto de la degradación  hasta llegar a esta manera distorsionada de informar a la ciudadanía; surgiendo de la mano del nacimiento del medio de difusión masiva actual que ha ganado terreno sobre sus antecesores de una manera descomunal, ya que la globalización de la información puede llevarse a cabo en segundos y ser llevada a millones de países y personas por medio de las “redes sociales”.

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