Todos vinimos del amor, o casi todos

Todos vinimos del amor, o casi todos, me incluyo dentro de los que fuimos creados a partir de un momento especial en el que se respiraba y transpiraba amor, lo que haya pasado después ya no importa, gracias a esos momentos de amor, para bien o para mal, tu estas en este mundo para amar, a ratos o para toda la vida.

Principalmente pienso que se debe amar a uno mismo sobre todas las cosas, recordar que viniste del amor y que de igual forma lo debes cultivar en ti.

Respiramos, vivimos y amamos, sobre todo amamos, a veces a la persona equivocada, algunas otras veces contamos con suerte y amamos a la persona indicada.

Miradas, caricias y besos. Besar suele ser más que una acción, es la más sencilla expresión de amor que una persona pueda dar y recibir. Cuántas cosas buenas trae un beso, cuántas cosas malas, cuantos hombres a diario olvidan la hecatombe que puede ocasionar tan solo un beso.

Cuantas mujeres piensan como hombre o actuan como hombre en ciertas ocasiones. Para su pesar ella era una de esas.

Alcoholizada por lo que tan solo iban a ser unos tragos sociales, los shots de tequila adormitaron su conciencia mientras dejaban a la deriva su instinto masculino exasperado por encontrarlo a el. Fue cuestión de minutos los que demoró para encontrar compañía, y fueron otros tantos segundos los que se tomó para traicionarse a ella misma y traicionar no a una persona, si no al amor que tanto le costó cultivar.

No encontró otra solución mas que entrar a la ducha y tratar de que el agua y el jabón eliminaran tanto la suciedad de su cuerpo como la de su alma y tan solo le queda esperar a que la vida le de otra oportunidad, ya sea para el bien de aquella relación, o para el bien de cada uno de ellos individualmente. Cualquier otra mujer hubiese pensado, tengo novio, no es correcto. Pero es en mujeres como ella en las que predomina su lado masculino y son aquellos besos los que pueden traer un sin fin de dolor, mucho dolor.

Lo bueno sería que él nunca se enterara y que su castigo tan solo sea el calvario que ella lleva por dentro. La verdad no salva relaciones, ni mucho menos evita el sufrimiento. Lo mas sensato fue guardarse ese sentimiento para ella sola, ya sea por respeto o por amor. Lo malo es que su amor por él se ha multiplicado en el lapso de unas cuantas horas debido a la culpa, y tan solo le sobra esperar que más adelante la vida lo ponga bajo la misma situación y le dé la oportunidad sin que el sepa de saldar cuentas.

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