Una Dieta Saludable

Algunas veces, nuestra rutina y la falta de tiempo hacen que no podamos llevar una dieta balanceada y olvidemos consumir alimentos que nos proporcionen nutrientes para que nuestro organismo funcione correctamente.

En cuestión de nutrición tenemos una excelente guía que es, el plato del bien comer. Esté facilita la orientación alimentaria y ayuda a fomentar buenos hábitos de alimentación en la población de todos los grupos de edad.

¿En que nos beneficia?

Nos brinda orientación y ofrece opciones prácticas para una dieta correcta, aprender a balancear nuestros alimentos de manera práctica y sencilla.

-Es una muestra grafica de las porciones que deben existir en cada comida.

-Nos ayuda a identificar con facilidad los grupos de alimentos para crear menús saludables.

-Y ninguno de los grupos se privilegia sobre otro.

La clasificación de grupos es en tres principales.

Verduras y Frutas: aportan vitaminas, minerales y fibra, así como color y textura a la dieta. Por ejemplo en este grupo tenemos la naranja, el plátano, la papaya, el brócoli, zanahorias y calabazas ente muchas más.

Es muy importante que de este grupo incluyamos cinco porciones al día, de preferencia crudas y de la estación.

Cereales: estos son los que principalmente nos aportan energía que nuestro cuerpo utiliza para realizar las actividades diarias, por eso su consumo es fundamental para el buen funcionamiento del organismo. En esté grupo incluimos el maíz, arroz, trigo, avena. Es mucho mejor consumir los cereales integrales por su aporte de fibra y su fácil absorción de ellos en el cuerpo.

Leguminosas y Alimentos de Origen animal: es el grupo que aporta proteínas.

Entre las leguminosas encontramos, frijoles, lentejas y habas. Su consumo es recomendable una o dos veces por semana.

Los alimentos de origen animal aportan grasa saturada (colesterol), por lo que es muy importante que se limiten a una cuarta parte de nuestro plato.

Para saber si llevamos una buena alimentación debemos tener en cuenta los siguientes puntos:

Completa: debe contener todos los grupos de alimentos, por lo tanto todos los nutrientes. Esto lo lograremos al incluir al menos un alimento de cada grupo por comida.

Equilibrada: siempre guardar las proporciones de los alimentos entre si, al hacer nuestros menús.

Suficiente: debemos cubrir las necesidades de nutrición de cada persona de acuerdo a edad, sexo, estatura, actividad física o estado fisiológico.

Variedad: incluyendo diferentes alimentos de los tres grupos en cada comida.

Higiénica: preparar los alimentos con limpieza.

Adecuada: para los diferentes gustos, costumbres y disponibilidad de los mismos.

Podríamos pensar que es complicado, pero en realidad es mucho más sencillo de lo que parece.

La única limitación que podríamos

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