Una imagen, vale mas que mil palabras?

Una imagen ¿vale más que mil palabras?

Conocida es la frase que dice: una imagen dice más que mil palabras. La mayoría de las veces se utiliza en un contexto tierno, romántico, cuando no se puede explicar o expresar que es lo que uno siente ante una imagen, ya sea de un imponente paisaje o una pareja que irradia amor. 

Sin embargo, la imagen últimamente ha cambiado su objetivo, ya que con el avance tecnológico en la calidad de fotografía sumado a los famosos filtros de imágenes, mostrar una buena imagen se ha vuelto una feroz competencia. La pregunta es ¿hasta qué punto esta competencia sirve de algo, o cuál será el extremo de la misma? 

Las aplicaciones de fotografías más populares han demostrado un poder de influencia en la sociedad que alimenta más y más la competencia. La popularidad de las celebridades, llamados influencers en esta nueva era, hacen que los usuarios de redes los imiten y así, influyen directamente en la vida de las personas, de ahí lo que da origen a su nombre. Sin embargo, estas influencias hacen que los jóvenes especialmente pasen mucho más tiempo con sus celulares y no comparten charlas cara a cara, ni siquiera con sus amigos y mucho menos con sus familiares. 

Se puede decir que el cuidado y la dedicación que hay hacia la fotografía para sumar ‘me gusta’ en diferentes redes sociales, lleva a que los jóvenes tengan conciencia de sus cuerpos, y dependiendo a quien quieran imitar, lleva a que lo que publican se vea agradable a la vista, y además descubren maneras de hacer arte nunca antes descubierto. Sin embargo, algunos cuidados son extremos y pueden perjudicar directamente a quienes intentan imitar o quieren ser como una figura a la cual jamás podrán alcanzar. 

Tomando en cuenta el avance de la tecnología en cuanto a la edición podemos afirmar que las imágenes en la actualidad cada vez “dicen menos” ya que con el poder de las herramientas digitales para la edición, una persona puede modificar el sentido original de la imagen y llevarlo para el lado que quiera mostrar. En consecuencia, el dicho “una imagen vale más que mil palabras” pierde sentido ya que lo único que expresa una fotografía es a gusto y placer del editor de la misma. 

Para concluir, el texto de Susi Mauer en la revista La Nación nos deja el mensaje que si bien siempre intentamos estar mejor, el espejo tiene la ‘generosa disposición’ de estar listos para recibirnos. Y la verdad, que por más que en las redes sociales intentemos ser otra persona, el espejo siempre nos dirá la realidad. Si los ojos son la ventana del alma, el espejo es nuestro fiel reflejo y nunca nos juzgará, ni con un ‘me gusta’, ni con un ‘no me gusta’.

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