Cultura Light

La cultura light se puede definir como la perdida de sentido crítico y razonable frente a las circunstancias que se evidencian en un determinado contexto social. Esta cultura siempre tiende a contribuir al deterioro y al ocaso de las diferentes sociedades que la adoptan, pues no permite el flujo de nuevas ideas y la construcción de nuevos proyectos de mejoramiento y desarrollo.

En Colombia lastimosamente somos participes de esta cultura, donde la desinformación y falta de interés, se convierten en factores que contribuyen al desarrollo de esta tendencia inútil y perjudicial. A pesar de que la realidad se ha visto movida por diferentes acontecimientos a nivel político, económico y social, la gente sigue encerrada en su cotidianidad esperando a que algún cambio milagroso ocurra de repente; tal es la gravedad, que no solo basta con que la gente se abandone a falsas esperanzas, sino que también que se encierran en marcos de entretenimiento y ocio donde el único objetivo es desviar la atención de los verdaderos problemas que atraviesa el país.

Me parece que muchas de las soluciones a la crisis generalizada que vivimos como ciudadanos podrían estar en el manejo que se le de a la información por parte de los medios y el análisis que cada ciudadano consiente le de a este; pues un pueblo informado, es un pueblo critico; que perfectamente puede discernir sobre la calidad de su educación, su salud, su economía, su desarrollo y también de sus dirigentes. Lo que propiciara a largo o corto plazo progreso y éxito.

El mundo de hoy promueve la deshumanización y el egoísmo, algo que ha traído consecuencias directas en la manera en la que nos relacionamos y en la manera en la que vemos el mundo. Los avances tecnológicos han traído avances en materia de ciencia y desarrollo, pero a su vez grandes fracasos en las relaciones interpersonales y valores morales. Esto ha producido que la personas pierdan la capacidad de sensibilizarse frente a las necesidades del otro, se ha dejado a un lado el concepto de comunidad, reduciéndola a una simple congregación de individualidades que andan por la vida en busca del beneficio y el interés propio.

La sociedad cada vez promueve más conformismo y abandono de las estructuras morales, lo que algún día nos llevara al caos total, pues una sociedad que no se rige por parámetros mínimos de convivencia y orden, está destinada a su propia destrucción. La sociedad colombiana está en ese proceso, y si nosotros como estudiantes no nos lanzamos al mundo con propuestas claras y efectivas, terminaremos siendo parte del inmenso grupo de cómplices que con su pasividad y desinterés están enterrando al país en un profundo abismo de dolor y decadencia.

Para concluir solo vale la pena recalcar el hecho de que nuestro deber va más allá de cumplir con un trabajo o un estudio, nuestro deber como ciudadanos está en la solidaridad

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