Debate De Las 2 Cambridge

Debate de las dos Cambridge

El punto central del debate, fue sobre las concepciones del capital y problemas relaciones con el cálculo y su agregación. Pero ¿Qué son dichas concepciones? ¿Cuál es la forma de calcularlos? ¿Qué pensamiento económico, fue utilizado y cuáles fueron sus bases?, bueno pues en el siguiente trabajo encontraremos y describiremos, algunas respuesta de a las preguntas planteadas, pero sobre todo, tendremos una percepción de dos puntos de vista con diferentes pensamientos económicos.

Varios economistas, por un lado de la Universidad de Cambridge en el Reino Unido, tales como Joan Robinson y Piero Sraffa, y por el otro lado el Instituto Tecnológico de Massachusetts en Cambridge Massachusetts en EUA, como Paul Samuelson y Robert Salow.

Estos autores representan dos grandes tendencias en el desarrollo de la disciplina económica en los comienzos de la segunda mitad siglo XX. Robinson como Sraffa siendo asociados al llamado postkeynesianismo; Samuelson y Solow los representantes de la otra corriente llamada síntesis clásica-keynesiana, el cual dicho pensamiento perduro durante este periodos.

Comencemos sabiendo que en una economía capitalista se caracteriza por dos sistemas de precios. El primero de ellos es el sistema de precios de los bienes como producto y el segundo de ellos es el precio de los activos de capital del sistema; El sistema de precios de producción depende de gran medida de los salarios y la ganancia, mientras que el precio de los activos de capital depende de las estimaciones en el presente de beneficios esperados o futuros.

Sraffa, firmo que existe una relación de intercambio entre salario y ganancia, lo cual implica una competencia entre esos factores por resultado del proceso de producción, lo que a su vez influencia el valor del capital. Esto que nos quiere decir, que el capital es mejor entendido como un instrumento o medida financiera de un valor económico variable.

El debate abarco muchos otros temas, tanto directa como indirectamente, principalmente acerca de asuntos de principio y problemas conceptuales, explicándolo principalmente con un lenguaje matemático y de lógica.

Para explicar los puntos de vista que se tocaron en dicho debate fue considerada la Función de Producción, hablando un poco de esta función, la cual es uno de los conceptos básicos; a partir del auge del marginalismo y del neoclasicismo. Por autores como Johan Heinrich von Thünen, Knut Wicksell y Philip Wicksteed, culminaron en la conocida función de producción Cobb-Douglas.

Y = F ( K,L )

En todos los modelos se asume que todos los “tipos de trabajo” y todas las “unidades de capital” son homogéneos entre sí mismo, pero heterogéneas en relación al otro concepto. Ejemplo de esto es que cualquier tipo de trabajo es directamente comparable a cualquier otro pero todos son diferentes a cualquier tipo de inversión. En cualquier caso tanto el trabajo como el capital se miden en unidades físicas.

Una vez comprendido lo anterior, podemos regresar al tema del debate, tomando la siguiente observación hecha por Joan Robinson: “al estudiante de teoría económica se le enseña a escribir Q = f (L,K), se le instruye a asumir todos los trabajadores como iguales y a medir L como horas-hombre de trabajo, se le dice algo sobre el problema de números índices en la elección de una unidad de producción, pero él se apresura al siguiente asunto, el cual se espera que se olvide de preguntar en qué medida se mide K y justo antes de que él lo pregunte, los hábitos de pensamiento descuidado se trasmiten de una generación a la siguiente”

Llama la atención al hecho que concepciones de un capital en general están, al igual que concepciones generales del trabajo, el cual es llamado problemas de agregación al igual que no se puede simplemente agregar manzanas con peras, es prácticamente lo mismo cuando nos referimos a trabajo manual, o físico simple, y trabajo calificado o intelectual.

Lo anterior nos hace que resalte como podemos calcular el monto real y la contribución del “capital agregado” cuando se consideran en un conjunto de empresas que producen muchos tipos de bienes y servicios, empleando miles o hasta millones de trabajadores y una multitud de herramientas y maquinas, utilizando diversas formas de división del trabajo.

Una respuesta bastante simple y tradicional, es que a tanto el producto como el capital agregado se miden en dinero (es decir que todo el capital industrial se trata como capital financiero)

Así como lo describimos anteriormente, el tratamiento de la función de producción tanto en el ahorro como en la inversión se considera homogéneo, lo que permite medirlos en la misma unidad. Pero nos encontramos con alguna inquietud, el cual es ¿Cómo agregar el valor de los bienes de capital? Y para poder resolver esta pregunta es sencillo, simplemente tenemos que multiplicar el número de unidades por su precio, y sumar el total de cantidades obtenidas.

Sin embargo, Robinson señala y posteriormente lo hace Sraffa, que esta manera de medir la cantidad total de capital depende tanto o más de

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