Disolución y liquidación de sociedades mercantiles

Disolución y liquidación de sociedades mercantiles

Disolución

Es la situación de una persona moral que pierde su capacidad jurídica para el cumplimiento de su fin social y únicamente está en espera de su liquidación. También es la situación de una sociedad mercantil que pierde su capacidad legal para el cumplimiento del fin para el cual fue constituida y sólo subsiste para la resolución de los vínculos establecidos por la sociedad con terceros, por aquellos con los socios o accionistas y por estos entre sí. Este acto puede darse de manera voluntaria y compete únicamente a los socios o accionistas decidir o a causas legales que señala el Art. 229 de la LGSM.

Según dicho artículo las sociedades se disuelven en los siguientes casos:

 Por expiración del termino de duración fijado en el contrato social (eventual)

 Por imposibilidad de seguir realizando el objeto principal de la sociedad o por quedar este consumado (forzosa)

 Por acuerdo de los socios o accionistas, tornado de conformidad con el contrato social y con la Ley (voluntaria)

 Porque el número de socios o accionistas llegue a ser inferior al mínimo legal, o bien la parte de interés se reúna en una sola persona (eventual a legal)

 Por la pérdida de las dos terceras partes del capital social (forzosa, legal y contable)

La disolución de una sociedad mercantil da origen a que ésta entre en liquidación. Entonces, la disolución es el primer paso para llegar a la liquidación de una sociedad mercantil.

La liquidación de una sociedad mercantil es el conjunto de actividades, actos y operaciones necesarias para concluir los negocios pendientes a cargo de la Sociedad, cuyos socios o accionistas han decidido liquidarla para proceder a cobrar lo que a la misma se le adeude. La liquidación debe practicarse de acuerdo con las bases establecidas en el contrato social o por los socios en el momento de acordar o reconocer la disolución. El período de liquidación abarcará el tiempo necesario para realizar las operaciones indispensables para dar término a las relaciones jurídicas, laborales, comerciales, etc., aun no concluidas.

La liquidación estará a cargo de uno o más liquidadores, quienes serán representantes legales de la sociedad y responderán por los actos que ejecuten excediéndose en los límites de su encargo.

Una vez nombrados los liquidadores, los administradores de la empresa les harán entrega de todos los bienes, derechos y obligaciones, libros y documentos oficiales y contables de la sociedad.

Dentro de las funciones de los liquidadores, según la LGSM, están:

• Concluir las operaciones que hubieran quedado pendientes

• Cobrar lo que se deba a la sociedad y pagar lo que ella deba

• Vender bienes de la sociedad

• Liquidar a cada socio o accionista su haber social

• Practicar el balance final

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