El teletrabajo en el contexto de la pandemia

Para iniciar, es importante esclarecer que la Pandemia ha afectado a nuestro país de manera abismal en el aspecto económico de la sociedad, acentuando como preocupación principal la productividad de varias empresas, pertenecientes a diferentes rubros del mercado. Más allá de esto, implica un proceso de evolución y adaptación a la situación conflictiva mediante la integración de nuevos recursos para que la economía se mantenga invariable en cierto límite, lo cual,  la mayoría de las empresas la consideran como un desafío colosal. Es por eso que vamos a considerar como una solución práctica y flexible al teletrabajo, que ha sido constituido desde hace años en algunas compañías que han crecido junto con los avances tecnológicos, pero no tuvo un reflejo notable en otras empresas arraigadas a trabajar de una forma más tradicional. Por lo que es importante adoptar una postura consistente y positiva, valorando esta modalidad de trabajo como una oportunidad para crecer tanto profesional como organizacionalmente, junto a la reforma de estrategias más rentables en tiempos de transición.

En primer lugar, la mayoría de los empleados con puestos de profesión, consideran al teletrabajo como una fuente de ingreso confortable de acuerdo al ambiente en el que desempeñan sus tareas laborales, incluyendo también a aquellos que cumplen el rol de padre o madre en sus familias.  Mientras que, para los trabajadores no calificados, se convierte en una realidad muy nociva al no tener la posibilidad de recurrir a otros métodos para abastecer sus necesidades, ya que sus trabajos requieren de herramientas manuales y esfuerzo físico, algo que no puede ser modificado y trasladado al mundo digital.

Para los tele trabajadores, esto varía en congruencia con el contrato laboral y las condiciones laborales modificadas y establecidas por la empresa, con la que mantienen una relación de dependencia. En cuanto a la ejecución del trabajo, es importante instaurar nuevas metodologías y la aplicación de nuevas tecnologías de información y comunicación que puedan ser eficientes en un ámbito fuera de la empresa, estableciendo adecuadamente canales de comunicación y la obtención de resultados esperados mediante estadísticas de evaluación. Por otra parte, conlleva la desventaja de que algunos empleados no se encuentran capacitados o no realizan un uso efectivo de los dispositivos tecnológicos, otra desventaja es la conexión digital en el hogar, ya que es un soporte sumamente necesario para la realización de todo tipo de tareas virtuales, por lo que también podría transformarse en un obstáculo para la adopción del teletrabajo.

En segundo lugar, las empresas deben establecer políticas más flexibles ante la pandemia, en base a las necesidades organizacionales y profesionales, para mantener la rentabilidad de su productividad. Fomentando de cierta manera la empleabilidad ante los cambios dinámicos que se producen actualmente en el mercado laboral, lo cual, el teletrabajo se instaura como un método más rentable que permite el ahorro de tiempo y costos, evitando el traslado  entre el hogar y el empleo, la optimización de la jornada laboral, la disminución de la tasa de ausentismo laboral, y fundamentalmente, la retención y motivación mediante la formación constante del talento humano, que puede enriquecer estructuralmente a la empresa e incrementar su productividad. La implementación jurídica de esta modalidad en las empresas, y la consumación de los derechos y obligaciones impuestos en el contrato laboral, puede ser de gran ayuda y establecer una conciliación que regule la calidad de vida familiar, social y laboral.

En tercer lugar, en cuanto a la legislación laboral y los convenios colectivos, no hay una ley específica que respalde esta actividad como beneficio jurídico-económico para los empleados que se desempeñan fuera de las oficinas en relación de dependencia. Sin embargo, hace varios años se estableció un proyecto de ley a favor de los teletrabajadores, con la intención de impulsar la igualdad de condiciones de subordinación jurídica y remunerativa a la de un trabajador de modalidad presencial, pero actualmente ya no se encuentra en vigencia. Es importante que este proyecto sea decretado equitativamente como ley en el contrato de trabajo ante la situación que nos toca confrontar hoy en día, implicando como principio la voluntariedad de los empleados para la ejecución del teletrabajo, dependiendo de la propuesta que plantee o no el empleador de recurrir a esa modalidad de trabajo vinculadas a las tareas que comprende el puesto laboral y cuando sea oportuno para la empresa, con el privilegio de revertir el trabajo de modalidad virtual a presencial, pero sin el derecho por parte del trabajador de exigir el teletrabajo.

Esto nos permitirá acceder a las negociaciones colectivas sin dificultad alguna ante las condiciones laborales y remuneraciones que se establezcan en los convenios, en razón de las tareas laborales que se realicen tanto por dentro y por fuera de la empresa, cumpliendo en tiempo y forma con las normativas legales.

https://www.iprofesional.com/legales/177722-teletrabajo-lct-regulaci%C3%B3n-Teletrabajo-el-Gobierno-impulsa-ley-para-regular-esta-actividad-que-involucra-a-2-millones-de-argentinos

http://www.todaviasomospocos.com/aportes/teletrabajo-normativa-aplicable-en-argentina-y-analisis-del-tema-en-el-derecho-comparado/

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