GESTION SOCIAL: SOSTENIBILIDAD Y SUSTENTABILIDAD

GESTION SOCIAL: SOSTENIBILIDAD Y SUSTENTABILIDAD

La Gestión Social se define como la estrategia de gestión público-privada que promueve desde la lectura sistémica, crítica y holística de las realidades del territorio y el estado, la construcción de respuestas integrales sobre la base del desarrollo, la participación social y comunitaria,  y el manejo eficiente de los recursos (naturales, económicos, técnicos y humanos). Tiene por objetivo mejorar las condiciones de calidad de vida de la población en los territorios, a partir del reconocimiento  del espacio y la sociedad, que permitan el  diseño e implementación  de directrices de convivencia que  garanticen los derechos como individuos y comunidades.  Basados en esta premisa, se identifica la interacción entre los componentes naturales y de vida de los territorios, y el componente humanista, el hombre, quien interactúa, transforma y se beneficia del entorno natural. De dicha relación nace como base de construcción para el desarrollo los componentes sociales, como indicadores de calidad ambiental, que inciden de forma predominante en las interacciones antropogénicas y las condiciones ambientales del territorio, visualizando al hombre o individuo como usuario de los bienes y servicios ambientales, que forma cultura, costumbres y hábitos,  existenciales para una comunidad, y es el principal doliente de las afectaciones o impactos ambientales producto del desarrollo.  Dicho análisis se presenta como una alternativa para abordar los paradigmas que separan los contextos sociales del concepto ambiente, y destacar herramientas que permiten afirmar, conceptos como el de garantiza las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer las posibilidades de generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades, desarrollo sostenible.

El Plan de Gestión Social (PGS) es el instrumento sistemático e integral de los impactos y riesgos generados por el desarrollo  y su interacción  con  la economía, el medio natural y los individuos; encaminado a la formulación de oportunidades para crear beneficios tangibles y sostenibles en los territorios, de acuerdo a los escenarios probables y reales, basado en  una visión de largo plazo que pueden derivarse de un aspecto social, económico o ambiental para las etapas de  planeación, construcción, operación, cierre y pos-cierre de un proyecto. En este sentido, los PGS van más allá de lo que se conoce como la inversión social y finalmente materializa la Política de Responsabilidad Social Empresarial, que se convierte en un pre-requisito para el manejo de un sistema socioambiental del licenciamiento ambiental exigido por ley por las autoridades para la ejecución de actividades de desarrollo, una vez son definidas como viables.

La Política de RSE de una organización se fundamenta, esencialmente, en el respeto a la cultura de las comunidades y de sus autoridades, en el fortalecimiento del diálogo de forma permanente sobre temas ambientales y de interés social. Para su formulación son necesarios los siguientes elementos:

• La definición de  la metodología corporativa de intervención social, donde se estructuran objetivos, líneas o principios estratégicos de manejo social que den respuesta a los riesgos y actores sociales previamente identificados y estos a su vez, sean coherentes con el Plan de Manejo Ambiental de las Operaciones que orienten los objetivos y las acciones a una gestión socialmente responsable así como los compromisos y responsabilidades de la alta dirección, quien debe asegurar el cumplimiento de la Política de Responsabilidad Social y el marco ético de las conductas organizacionales.
• Evaluar los recursos económicos, técnicos y humanos para el alcance y el cumplimiento de los objetivos.
• Designar un líder o líderes del proceso, para la implementación, mantenimiento y revisión de las actividades del caso.
• Definir un Plan de Monitoreo y seguimiento que permita hacer control de las actividades planeadas vs las ejecutadas y ponderar el cumplimiento de los tiempos asignados en la planificación de la Política, este monitoreo permitirá retroalimentar las actividades y mejorar continuamente la estrategia de intervención social.
• Definir acciones fundamentales del plan de acción como informar, capacitar, resolver/convocar, gestionar ó resolver/invertir, de acuerdo a los compromisos establecidos con los grupos de interés.

Una vez hecho el diagnóstico, documentado el proceso y sistematizados todos los resultados de la formulación de los componentes de la Política, se procede a la construcción del Plan de Comunicaciones y/o consulta interna y externa, como medio de participación desde antes, durante y después de la ejecución de las actividades de Desarrollo, divulgando a los grupos de interés la información básica de la organización, objetivo , alcances y principios de la política, los riesgos identificados, los resultados socioambientales de las medidas de manejo propuestas, los estudios de impacto ambiental, las oportunidades de desarrollo local, entre otros.  

El éxito o fracaso de las estrategias de gestión social propuestas en un plan de intervención, parten del esquema de relacionamiento socioambiental que se formulan desde el primer momento de planeación de las actividades de desarrollo y de los principios  que asume la organización con relación a la población, en ese orden de ideas, las actividades de mayor resultado se definen a continuación:

• Trabajo en equipo. Trabajar en forma conjunta y pro-activa entre miembros de la empresa, clientes, proveedores, autoridades, comunidades con el objeto de crear soluciones, implementar mejoras, promover el desarrollo y cumplir las metas de la organización, utilizando una comunicación abierta, clara y honesta.
• Compromiso. Creer en la visión de la organización y actuar de acuerdo a ella con sentido de pertenencia (orgullo por su empresa), desarrollando el trabajo en forma profesional, cumpliendo con  los planes en el plazo establecido, con la calidad y costos determinados, y tomando la iniciativa en cada actividad. Lema: “Se hace lo que se dice”.  
• Respeto por las personas. Respeto por las opiniones e ideas de los demás, tanto al interior de la organización como al exterior de la misma. Asimismo, el respeto a la libertad de expresión sin discriminar raza, cultura, género, credo o condición social fomentando la igualdad de oportunidades y buscando la armonía con las comunidades en el ámbito de las actividades de la empresa.

Por las razones anteriormente expuestas, un adecuado Modelo de Gestión Social permite viabilizar las actividades de desarrollo en  cualquier territorio, optimiza los recursos asignados a los proyectos sin  costos extras por contratiempo generados a partir de conflictos socioambientales y dar cumplimiento a los objetivos de intervención social, que buscan elevar las capacidades de los grupos poblaciones del área de influencia, no sólo para generar una mayor sensibilidad ambiental para la comunidad, sino también para contribuir al impulso de iniciativas locales en aras de lograr el desarrollo local bajo una óptica sostenible y sustentable.

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