Importancia de la Cultura y la Comunicación Institucional

Importancia de la Cultura y la Comunicación Institucional

El profesor Heriberto Cardoso reivindica el lugar de la Comunicación organizacional, como el conjunto total de mensajes emitidos que se intercambian entre los integrantes de una organización y entre ésta y sus diferentes públicos externos, encaminados a mantenerse o mejorar sus relaciones con ellos y a proyectar una imagen favorable o promover sus productos o servicios.

Su importancia radica en que gracias a los procesos comunicativos que se producen entre los integrantes de una organización se logra una coordinación de la acción conjunta para un logro óptimo de los objetivos institucionales. Además genera canales de comunicación eficientes donde la comunicación que fluye a través de estos es eficaz, coherente y motivada; logrando incentivar a sus integrantes y mejorar el clima de la organización y así mejorar el rendimiento.

Con buenos canales de comunicación y con flujos de información pertinente y motivada se proporciona satisfacción a las necesidades personales de los miembros de la organización y propicia la participación, integración y mejora la convivencia; lo cual confluye en el reconocimiento de las capacidades individuales y colectivas. Todo esto ayuda a fortalecer la identidad con la organización.

Con una organización fuerte internamente, la comunicación organizacional se encarga de mejorar las relaciones con los públicos externos, proyectar su mejor imagen y lograr generar un posicionamiento en la mente del consumidor o usuario.

Con la comunión de los argumentos anteriores se logran planes de contingencia que ayuden a prevenir los conflictos internos y a tener un manejo coordinado y coherente en casos de crisis externas.

El cambio de modelo de comunicación se presentó en un primer momento como una crisis, y por definición luego fue vista como oportunidad. Una crisis puede definirse como un momento decisivo para la organización donde lo que se juega es su existencia como tal. Ahora imaginemos esa lucha por sobrevivir entre dos modelos de comunicación, uno dinámico que ofrece interacción entre sus integrantes y sus públicos primarios donde el resultado es medible en calidad y cantidad, y otro más clásico que pretende seguir viendo a las personas que forman a la organización como meras piezas de una maquinaria.

El profesor Cardoso afirma que muchas de las organizaciones que ya han desaparecido lo han hecho por no darle el valor debido a la comunicación hacía adentro de su organización y hacia afuera de una manera coherente y sincera. Y para lograr esto debemos tener muy en claro qué somos, qué queremos llegar a saber y qué sacrificios necesitamos realizar para ello. Una vez logrado esto debemos realizar una auditoría a conciencia, dejando como resultado la situación actual de nuestra organización y nos dará un panorama

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