LA GESTIÓN EN LA ESCUELA EN LAS NUEVAS PERSPECTIVAS DE LAS POLÍTICAS EDUCATIVAS

INTRODUCCIÓN

La mejora en la calidad educativa es una prioridad política y social en México, especialmente en años recientes, debido a las altas tasas de pobreza, la fuerte desigualdad y el aumento de la criminalidad. Aunque ha habido una mejora educativa y un enfoque cada vez más importante en las políticas educativas en años recientes, todavía una alta proporción de jóvenes no finalizan la educación media y superior y el desempeño de los estudiantes no es suficiente para proporcionar las habilidades que México necesita. La jornada escolar es corta, con tiempo de enseñanza efectiva insuficiente; y en muchas escuelas la enseñanza y el liderazgo son de baja calidad, y el apoyo con el que se cuentan es débil.

Las nuevas estrategias que el gobierno ha puesto en práctica para garantizar el éxito en la reforma educativa subyacen principalmente en optimizar la enseñanza, el liderazgo y la gestión escolar en las escuelas, con el fin de mejorar los resultados de los niños en educación básica. Sin embargo, la crisis económica ha desatado una serie de problemáticas ligadas al gasto publico que se destina al sector educativo, dando como resultado falta de materiales didácticos, disminución en la contratación de docentes capacitados o en los pagos de los salarios de maestros en servicio, estancamiento para introducir recursos tecnológicos que permitan a los alumnos adquirir habilidades relacionadas con las TIC’S, suspensión de mejoras en la infraestructura de los edificios escolares y detención del desarrollo de proyectos que ayuden a fomentar valores y habilidades sociales que se requieren actualmente.

Por esta razón, en el presente documento expondré las principales afectaciones que ha sufrido el ramo educativo en todas sus instancias (administración, organización, preparación profesional y el contexto socio-cultural) por causa de la crisis económica mundial y las estrategias de desarrollo que requieren ser gestionadas para superar los obstáculos en México. En la parte final de este análisis mencionaré algunas bases que pueden orientar nuestro papel como docentes de educación primaria, sin embargo, no constituyen una guía rígida ni obligatoria, sino un compendio de ideas surgidas desde la perspectiva de mi experiencia en diversas escuelas primarias.

DESARROLLO

Actualmente, la crisis económica ha influido negativamente en todos los aspectos de la vida cotidiana, especialmente en servicios como salud, alimentación, transporte, energía, programas asistenciales y en la educación. Este último punto mencionado realmente es el más preocupante en relación con el desarrollo del bienestar social debido a que ha originado las siguientes dificultades:

Incremento de los índices de repetición y fracaso escolar, especialmente en la escuela básica. La mayor concentración está en los sectores pobres, rurales y marginales y desde el punto de vista pedagógico ocurre en los primeros grados de la escuela vinculado al aprendizaje de la lectura y la escritura.

 Interrupción del proceso de incorporación de los hijos de familias de sectores populares a los niveles postbásicos del sistema educativo. Es decir, cada vez menos alumnos son inscritos en el nivel medio superior y superior especialmente por la cuestión de no poder solventar los gastos escolares como compra de libros, alimento y transporte.

 Aumento de una diferenciación interna del sistema educativo. Como las escuelas públicas son de baja calidad, se han creado instituciones privadas que con sus innovaciones pedagógicas preparan con mejores competencias a los alumnos que pueden acceder a este tipo de educación, formando así una clase elitista.

 Deterioro de la calidad de la educación: el salario docente y la proporción del presupuesto educativo destinado a equipamiento, capacitación, infraestructura, libros de texto, etc. han disminuido, lo que conlleva a el abandono de la profesión por parte de los docentes más calificados, el ausentismo y la desmoralización creciente del personal de la educación, huelgas prolongadas y corrupción.

Como resultado obtenemos que los desafíos estructurales que permanecen son la falta de capacitación, distribución poco clara de responsabilidades a través del sistema descentralizado, y las condiciones estructurales y procesos no facilitan que las escuelas estén en el centro de las políticas educativas. Las escuelas operan con escasos recursos que necesitan estar mejor distribuidos entre ellas. Esto requiere una mayor capacidad y la creación de estructuras institucionalizadas que garanticen el diálogo y la construcción de consenso.

En concordancia con el Juan Carlos Tedesco al mencionar que una de las estrategias de cambio puede ser definir una nueva jerarquía de prioridades en la asignación de recursos, en mi opinión considero que esto es lo que realmente es emergente, y he aquí el eje medular que oriente el nuevo papel de la gestión escolar. Esta tensión entre cambio y continuidad parece una clave fundamental para analizar el discurso en que se plasman oficialmente las nuevas políticas educativas nacionales del gobierno mexicano.

El discurso del SNTE, la SE y el gobierno federal resulta interesante: sin abandonar los propósitos modernizadores de la década anterior, se pretende buscar al mismo tiempo la calidad y la equidad. El ideal que se busca es alcanzar niveles de cobertura, eficiencia terminal y aprendizaje en educación básica, media superior y superior que nos acerquen a los de los países mas desarrollados con los que la globalización nos obliga a interactuar, al tiempo que reducir las desigualdades ancestrales de la sociedad mexicana y fortalecer su identidad multicultural.

Sin embargo, las preguntas son ¿cómo se pretende lograr este propósito si cada vez se destina menos presupuesto para el gasto público en educación? ¿Cómo pueden estar los maestros motivados o interesados para realizar una enseñanza efectiva si sus salarios no son pagados en tiempo y forma y también son seres humanos que requieren pagar para satisfacer sus necesidades básica como sostener a sus familias? ¿De qué forma los padres de familias lograran cubrir todos los gastos de sus hijos si el salario mínimo solamente alcanza para “sobrevivir” y en peores casos el desempleo impide la obtención de fondos?

Estas interrogantes son las

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