La Guerra Civil Siria

• Introducción

      La Guerra Civil Siria es un conflicto bélico iniciado a principios de 2011 y que aún se da en la actualidad en Siria. En esta guerra se enfrentaron en su inicio las Fuerzas Armadas de Siria del gobierno del presidente sirio, Bashar al-Asad, contra grupos armados rebeldes de diversa índole, conocidos en Occidente como la «oposición siria». Más adelante, numerosos grupos y combatientes de los «rebeldes» se unieron a los yihadistas del Estado Islámico de Irak y el Levante —EI (Estado Islámico) en español; ISIS en inglés.

     Debido a la participación de numerosas potencias extranjeras se la ha denominado como una guerra subsidiaria. El gobierno sirio, presidido por Bashar al-Asad, cuenta con el apoyo de Rusia, que lo considera un país aliado desde tiempos de la Unión Soviética, la República Islámica de Irán y la organización libanesa Hezbolá. El gobierno y sus aliados defienden que las manifestaciones y primeras revueltas armadas fueron organizadas y financiadas por Occidente, así como a algunos grupos yihadistas, para precipitar la caída del gobierno y controlar el país, opinión respaldada por analistas independientes. Por otro lado la «oposición siria» es apoyada por Estados Unidos, Turquía, Arabia Saudí y otros países aliados occidentales y del golfo Pérsico. 

     Según cifras oficiales, en el año 2015 la cifra de muertos, producto de la Guerra Siria, ascendía a más de 220 000; (ya en 2013 se contaban 63 072 víctimas civiles) provocando la huida de más de 3 000 000 de refugiados, dejando a la mayoría de las ciudades en un estado de semi devastación. La guerra de Siria ha elevado el número de desplazados a escala mundial a su máximo nivel en los últimos 18 años, mientras que el 40 % de la población está en una situación de crisis. Se han usado armas químicas en repetidas ocasiones, y ambos bandos del conflicto han sido acusados desde diversas organizaciones y gobiernos de cometer crímenes de guerra y graves violaciones de los derechos humanos, así como también daños patrimoniales históricos. Este cúmulo de atrocidades ha convertido al conflicto en la más brutal crisis de la Primavera Árabe y una de las peores guerras del siglo xxi.

     Respecto a Zaatari, es el segundo campo de refugiados más grande del mundo. Está ubicado en Jordania a 10 km al este de la ciudad de Mafraq. Fue inaugurado el 28 de julio de 2012 al acoger ciudadanos sirios que huyen de la Guerra Civil Siria que estalló en 2011. Gradualmente este campamento, está evolucionando en un asentamiento permanente. El último recuento oficial realizado en 17 de noviembre de 2015 realizado por UNHCR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados), cifró en 79 140 personas viviendo en el campamento. (Fuente: Enciclopedia libre Wikipedia. Recuperado de https://es.wikipedia.org/wiki/Guerra_Civil_Siria)

• Desarrollo

     Decidir hacer un trabajo práctico, en el que analizamos la triste realidad vivida por los más de 80.000 refugiados sirios del campo de Zaatari (Jordania), y relacionar estas vivencias con los conceptos vertidos desde la cátedra, implica hacer un recorte de dicha realidad, basándonos en aquella información que consideramos fidedigna, pero ateniéndonos a la idea de que reproducimos la opinión de diferentes periodistas, por lo tanto, dicha información no es objetiva. Desde el Ministerio de Educación de la Nación, se plantea que: “la producción de subjetividad, abarca aquellos aspectos vinculados a la construcción social del sujeto, en relación con lo ideológico e inscripta en un espacio y un tiempo específicos que la influyen y determinan”. (“Aportes para la construcción de la modalidad Educación domiciliaria y hospitalaria”, 2014, p.33). Con lo que, cada uno de los periodistas y medios a los que haremos referencia en este trabajo, responden no sólo a su subjetividad, sino también a sus propios intereses. 

     Analizar el contexto histórico y las razones por las que los refugiados sirios han llegado a la situación que actualmente les aqueja, implica entender que en el medio hay grandes intereses, que la guerra civil siria no se reduce a un conflicto interno, ni tampoco a una lucha sectaria. En esta guerra, que lleva más de cuatro años, están involucrados países como EEUU, Rusia, Israel, Irán, y muchos otros, que en mayor o menor medida participan de este conflicto, pues hay en juego, importantes réditos políticos y económicos.

     Litto Nebia, canta: “Cuando no recordamos lo que nos pasa, nos puede suceder la misma cosa ... oh... Si la historia la escriben los que ganan, eso quiere decir que hay otra historia: la verdadera historia”. Según Foucault (1976), la historia que emana de los centros de poder, es una versión en dónde se producen efectos de verdad y saber, en el sentido de conocimiento; por lo que ésta se presenta ante el mundo, como la realidad por excelencia, verdad relativa, condicionada a los intereses de las posiciones dominantes. Parafraseando a Nietzsche: “no hay hechos, sólo interpretaciones de los hechos ”, y la interpretación que se presenta como verdad, es la que se repite una y otra vez desde los centros de poder.

     Sin que esto se interprete como un relativismo o un escepticismo extremo, lo que inferimos con nuestra apreciación es que, cuando desde los sectores hegemónicos se busca instalar una “verdad” distorsionando o encubriendo la realidad, el objetivo es erigir un mecanismo irreflexivo que lleve a que los hechos no sean intuidos en su originalidad ni examinados en profudidad. Según Pichón Riviére (1985), la ideología dominante mistifica en tanto oculta, desde los intereses de los sectores hegemónicos en la sociedad, la esencia de la vida cotidiana. Este encubrimiento y distorsión se da a través de un mecanismo peculiar, por el que se “naturaliza” lo social, se universaliza lo particular y se atemporaliza lo que es histórico, constituyendo la realidad dada, desde este proceso mistificador, un orden natural, universal, eterno e inmodificable. (p.72). Berger y Luckman (1999), plantean que el lenguaje cumple una función imprescindible: como forma de extender la comprensión y el sentido de la realidad de una manera consistente y coherente con la realidad subjetiva de los individuos, lo que tiene lugar, fundamentalmente, a través de la creación de universos simbólicos. Estos últimos organizan de forma coherente, la posición que ocupa cada uno en el conjunto social, los roles que desempeña, su propia identidad y el total de relaciones que constituyen la vida cotidiana. El simbolismo y el lenguaje llegan a ser constituyentes esenciales de la realidad de la vida cotidiana y de la aprehensión que tiene de esta realidad el sentido común. “El lenguaje construye entonces enormes edificios de representación simbólica que parecen dominar la realidad de la vida cotidiana como gigantescas presencias de otro mundo. La religión, la filosofía, el arte y la ciencia son los de mayor importancia histórica entre los sistemas simbólicos de esta clase”. (Berger y Luckman, 1999, p.59). En este sentido, el poder en sí mismo, su capacidad para imponerse constituye otro mecanismo de mantenimiento; con lo que la ideología es un medio que sirve a un interés de poder concreto.

...