La Injusticia.

La Injusticia

        Es preciso señalar que de los males que afectan la sociedad dominicana se encuentra la injusticia; la cual permite la corrupción y la impunidad. Pues, esta no solo afecta al Estado, sino también, al pueblo dominicano. Cada día en la República Dominicana se experimenta la misma a su máximo nivel. Ésta se puede definir como la ausencia de justicia en referencia a un acto o suceso. En adición, se le otorga cierto permiso a los funcionarios públicos de alta jerarquía del país para que puedan cometer actos ilícitos sin recibir ninguna penalización por los mismos. Por eso, se aumenta el numero de corruptos, la delincuencia, los atentados, y le entrega a las personas un gran libertinaje para que estas hagan lo que se les parezca. Es triste pero cierto que la injusticia en la República Dominicana es cada día más grave y el tema se convierte aun más preocupante, pues ningún dominicano se ha atrevido a perseguir incansablemente la misma.

¿Cómo es posible que aquellos que están supuesto hacer justicia en nuestro país son los mismos que luchan para que haya ausencia de esta? En realidad es una pregunta difícil de responder hasta que salen a la luz aquellos vivos ejemplos de jueces que prefieren ganarse dinero en vez de hacer su trabajo dignamente y perseguir la justicia debidamente. No obstante, estas personas se han olvidado del gran daño que le están haciendo a la sociedad dominicana con sus acciones. Así como lo manifestó el Procurador General de la Republica, Francisco Domínguez Brito (2015): “El que se compra o se vende es simplemente una cosa, pues ha abandonado la esencia del ser y dignidad.” Es decir, aquellos jueces que se aceptan “dinero sucio” de las personas que deben ser juzgadas por actos ilícitos automáticamente pierden su honra. Del mismo modo, muchos de los jueces que forman parte del Poder Judicial son incapacitados, o mejor dicho, no son capaces de rechazar las tentaciones y entender que ellos están en esa posición para defender lo que es justo y penalizar lo que no lo es.

Más adelante, se evidencia que desde que se le otorga la libertad y no se juzga a un funcionario público que ha afectado negativamente al pueblo dominicano, no se le hace a ninguno de los demás. Se muestra como esto se convierte en una costumbre donde reina la injusticia. Sin embargo, hay personas que si creen en la justicia pero aunque dicen que nos encontramos en un país donde existe la libertad de expresión cuando estas quieren expresarse para decir una realidad, los cohíben y ponen en riesgo hasta su propia familia. Por eso, nadie toma la iniciativa de luchar por la justicia del país. No obstante, la República Dominicana ha creado un ambiente propicio para que desde el más pequeño de los servidores públicos hasta el funcionario de mayor jerarquía se robe el dinero del pueblo dominicano. En noviembre del 2013, el estudio sobre República Dominicana del Centro de Estrategia y Estudios Internacionales (CSIS) encontró que el control del poder legislativo y del judicial por parte del partido en el poder, unido a una “oposición fragmentada y débil” ha contribuido, a asentar “una cultura de la corrupción en el Gobierno” la cual socava las perspectivas de crecimiento económico de la nación. Además, el Foro Económico Mundial en su Reporte Global de Competitividad 2010-2011, confirma los resultados del CSIS. Encontró que la corrupción del gobierno dominicano desvía más recursos públicos hacia empresas, grupos e individuos, que 135 países de los 137 incluidos en el estudio.

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