La Práctica De La Actividad física Por Medio De La Fisioterapia Como Estrategia De Promoción De La Salud.

Las enfermedades no transmisibles (ENT) constituyen la principal causa de mortalidad en el mundo. La efectividad de intervenir en los factores de riesgo como la falta de actividad física, la mala nutrición y el consumo de tabaco y de licor, dando como resultado enfermedades como: enfermedades cardiovasculares, hipertensión arterial, obesidad, diabetes tipo II y algunos tipos de cáncer. La promoción de estilos de vida saludable es una estrategia mundial para disminuir la carga en la salud de las ENT.

Para reducir el impacto que estas enfermedades tienen es importante entender el concepto de salud como un proceso que se va construyendo día a día y de esta forma establecer la relevancia de intervenir en procesos de cambio de comportamiento que lleven a estilos de vida más saludables. Los encargados de implementar las estrategias de cambio en actividad física, alimentación saludable y control del consumo de tabaco deben conocer y manejar estos temas con el fin de mejorar la salud y la calidad de vida de sus comunidades y del país.

El impacto de la actividad física en la prevención y el manejo de las enfermedades no transmisibles (ENT) causadas por los problemas ya expuestos han demostrado beneficios en personas sedentarias que sufren de problemas de obesidad y cambios en los comportamientos de estilos de vida más saludables implementando mejoras en la actividad física, en alimentación saludable y el control de consumo de tabaco y alcohol, mejorando la salud y la calidad de vida de las personas. Dándole importancia a la intervención a nivel comunitario que busca crear estrategias en la reducción de sedentarismo, tales como: adecuaciones en el ambiente, incrementando el uso de gimnasios públicos en los parques, menor uso de automóviles, estimular el uso de bicicleta como medio de transporte, etc. Actualmente se han aumentado las diferentes campañas que buscan implementar éstas estrategias por medio de entidades gubernamentales como: alcaldías municipales, secretarias de salud etc.

Para entender la actividad física como estrategia de la promoción de la salud debemos primero conocer la definición de la segunda, la cual es el proceso que permite que las personas incrementen el control sobre su salud y en consecuencia mejorarla. En este sentido, el individuo debe ser capaz de alcanzar el bienestar físico, mental y social para adaptarse al medio ambiente y satisfacer sus necesidades. La promoción de la salud debe ser complementaria con la prevención primaria, ya que prepara condiciones individuales y colectivas desde la actividad física.

La actividad física se vincula al concepto de salud y calidad de vida que permite satisfacer las necesidades individuales y colectivas de las personas, además de traer beneficios biopsicosociales, por lo cual es una herramienta muy efectiva, sin embargo hoy en día las personas no ven la actividad física solo como un instrumento para tener mejor salud, sino para satisfacer algunas de sus necesidades, como autoestima, la automotivación y la socialización con otras personas, en otras palabras el “verse bien”. La visión de la actividad física en relación con la salud puede ser vista desde ámbitos terapéuticos, preventivos y de bienestar; el primero considera ésta como un conjunto de técnicas no invasivas para la recuperación de determinada función corporal, la segunda la utiliza como una herramienta para reducir riesgos de enfermedades, y la tercera, consiste en que esta puede fomentar el desarrollo social y personal.

Al articularse estos ámbitos de la actividad física con respecto a la salud nos acercamos a un concepto integral que abarca aspectos colectivos haciéndola una herramienta efectiva en la promoción de la salud.

Teniendo en cuenta los ya expuestos beneficios del ejercicio y la actividad física como método de promoción de la salud, se espera que ésta se fortalezca gracias al desarrollo de las cualidades físicas para así disminuir los factores de riesgo en la adquisición de

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