Las Reglas del Método Sociológico - Emile Durkheim Capítulos III y IV

Necesidad de defender la utilidad práctica de la ciencia a través de un criterio objetivo que permita distinguir la salud de la enfermedad en los fenómenos sociales.

Analogía con el organismo: Antagonismo salud-enfermedad. Salud como lo normal y deseable, enfermedad como lo patológico y evitable.

I. Análisis de las concepciones corrientes de enfermedad.

Se debe distinguir lo normal de lo patológico de acuerdo con signos objetivos, perceptibles que den cuenta de tal distinción.

Todo fenómeno sociológico puede presentarse de dos formas: una forma normal, general a todos los individuos de la especie y una forma mórbida o patológica, en la que se presenta en una minoría, representando una excepción tanto en tiempo como en espacio.

Definición de tipo promedio: conjunto de caracteres más frecuentes de la especie con sus formas más frecuentes.

Cada especie posee su tipo promedio que le es propio, por ende su propia salud y enfermedad. Un hecho social sólo puede calificarse de normal o patológico en relación a una especie social determinada y a una fase igualmente determinada de su desarrollo.

Las condiciones de normalidad prueban ser más ventajosas que las patológicas. Éstas últimas se encuentran en relación de inferioridad con las primeras.

II. Es preciso hacer una comprobación extra luego de aplicar la regla precedente: Se deben buscar las causas de la generalidad del hecho previamente determinado como normal. Podremos asegurarnos de clasificar a un hecho social de normal cuando la causa de su generalidad sea, o bien la utilidad que esta presenta para la especie social; o bien que ésta está implicada en la naturaleza misma de dicha especie.

Esta comprobación se vuelve especialmente apremiante cuando se trata de una sociedad en período de transición. Sólo podremos calificar al hecho de normal si las causas que determinaron su generalidad en el pasado aún siguen presentes.

III. Ejemplos de errores comunes cuando no se respetan estas reglas. Ejemplo de la criminalidad.

Capítulo IV. Reglas relativas a la constitución de los tipos sociales.

Ventajas del concepto de especie social.

I. Es inútil e imposible formar la clasificación de especies sociales mediante un escrutinio de todas las sociedades.

Se debe empezar buscando la sociedad más simple que haya existido como base natural de la clasificación

        II. Concepto de horda: agregado social de individuos que no comprende ni ha comprendido jamás segmentos o particiones dentro de ella.

Las sociedades pueden clasificarse de acuerdo a dos criterios: en primer lugar, según su grado de composición, de más simples a más complejas. En segundo lugar, según qué tan disueltos se encuentren los segmentos sociales que las constituyen.

        III. Las sociedades engendradas por otras son necesariamente distintas a sus ancestras. A diferencia del mundo biológico, en el mundo social “los atributos distintivos de la especie no reciben de la herencia el incremento de fuerza necesario para resistir las variaciones individuales.”

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