Rasgos Neogallegos

La Nueva Galicia

La ansiedad española por poseer la mayor cantidad de tierras, el carácter monopolista de este grupo y el surgimiento del mestizaje son los puntos distintivos de la época colonial.

Al término del proceso de conquista, el grupo europeo ejerció su papel hegemónico, propiciando el surgimiento de dos culturas diferenciadas en intereses y costumbres.

Aún cuando las Leyes de Indias intentaban proteger a los naturales, lo cierto es que se consumó un despojo a los mismos. La incruenta aculturación exigida propició una baja en la población de indios, asimismo el cambio de modo de producción redundó en trastornos profundos en la sociedad indígena. Los naturales se incorporaron a la economía colonial como la mano de obra disponible y obligada. Algunos indios buscaron refugio en terrenos abruptos donde se aislaron del influjo español, otros se establecieron en los alrededores de las poblaciones fundadas por los europeos, en donde se imponía una ideología que sepultó la cultura nativa.

Guadalajara se convirtió paulatinamente en el centro de la región occidental. Administrativamente la Nueva Galicia se conformaba por el Presidente de la Audiencia y un Capitán General nombrados ambos por el Consejo de Indias.

La Sociedad se dividía en castas perfectamente estratificadas, con una economía sustentada por en la agricultura y el comercio.

Los naturales contaban con posesiones de tierra bajo el nombre de “fundos legales”, con una extensión de 101 hectáreas y un cabildo democrático. Aun cuando se introdujeron sistemas de siembra europeos los indios continuaron con el sistema tradicional de “maíz de pozo”, vendiendo el excedente que era aprovechado por los europeos para lograr un acaparamiento con enormes ganancias.

Por su estratégica localización, Guadalajara y San Blas se convirtieron en puntos de partida para las expediciones que colonizarían el norte del territorio novohispano, encomendadas principalmente a los Jesuitas.

La tarea de aculturación corrió a cargo de los grupos religiosos que acompañaron a los españoles soldados: franciscanos y jesuitas principalmente. En 1531 los franciscanos establecieron en Tetlán el primer convento de la orden, de este punto se iniciarían desplazamientos para el logro de su cometido:

• Por el Sur a partir de Ajijíc y hasta Colima.

• Hacia el Noroeste de Etzatlán hasta Acaponeta.

• Por la ruta Noreste desde Juchipila hasta los actuales territorios de Durango.

Los jesuitas utilizaron las tierras neogallegas como base de operaciones para la evangelización de tierras norteñas. Del puerto de Barra de Navidad partió también la expedición comandada por López de Legazpi que lograría la conquista de las Filipinas.

Estratificación Social

Los principales centros de población fueron el asiento de españoles y criollos, estableciéndose alrededor de los mismos los indios.

Como en todo el territorio de la Nueva España, el territorio de la Nueva Galicia en cuanto a su sociedad se encontraba dividida en razas:

• Peninsulares: Llamados también chapetones o gachupines. Dueños de las encomiendas. Ocupaban cargos altos, podían comerciar y tener minas y terrenos dedicados a la Agricultura y Ganadería.

• Criollos: No ocupaban puestos públicos, pero si podían ejercer las funciones y actividades mencionadas en el primer grupo.

• Indígenas: Se denominaba así a los grupos originales, no mezclados; eran considerados judicialmente como menores de edad y no podían efectuar operaciones de venta de terrenos sin el auxilio de un juez o un sacerdote. Efectuaban labores en el campo o domésticas.

• Castas: No podían poseer tierras pero si se les permitía comprar. Las castas estaban conformadas por mestizos, mulatos, zambos y otras clasificaciones.

• Mestizos Son la base del México de hoy, surgidos de la mezcla de indígenas y españoles.

Los esclavos negros llegaron a la que con el tiempo sería capital del Reino de la Nueva Galicia, justamente desde 1550, apenas ocho años después de la definitiva fundación tapatía.

En las ciudades, los naturales se dedicaban a desempañar labores de servidumbre en las casas de los europeos, mientras que en las áreas rurales desempeñaban actividades relacionadas con la agricultura, la ganadería y en menor proporción la minería. Andando el tiempo indios y mestizos desempeñarían un papel predominante tanto en los trabajos citados como en el comercio.

Con todo, las ganancias económicas se reservaban de manera casi exclusiva a los españoles. Si bien los indios contaban con terrenos en donde se seguía practicando la agricultura colectiva, debían acatar las órdenes de los europeos cuando se les llamaba a servir en las propiedades de estos.

Actividades Económicas

Con excepción de unas cuantas minas, que no alcanzaron a satisfacer las altas expectativas originales, los españoles debieron volver los ojos hacia actividades como la cría y engorda de ganado y el cultivo de trigo y caña de azúcar para la venta, ya que el maíz y el frijol se destinaban al consumo local.

La minería tuvo un gran auge en Zacatecas, pero su administración quedó en manos de la Nueva España directamente. Sin embargo la explotación del Real de Bolaños dio un importante impulso económico a la región circundante.

El sistema crediticio era casi inexistente a excepción de los créditos que con garantía de propiedades otorgaba la Iglesia.

Durante

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