Sociología Rural: Crisis Y Perspectivas.

SOCIOLOGIA RURAL: CRISIS Y PERPECTIVAS.

Por: David Rodríguez Reyes, alumno de Sociología de la Universidad del Desarrollo del Estado de Puebla (UNIDES).

La Sociología en los últimos años parece ser una disciplina social castigada; oprimida y perseguida, no solo porque gran parte de su quehacer consiste en criticar las estructuras de una sociedad decadente que últimamente busca redefinir sus ideologías políticas y modelos económicos, actualizar sus estructuras y revitalizar sus sistemas de control social, sino también por su poca precisión teórica y metodológica. Si la Sociología general desde sus orígenes fue y ha sido sacudida desde la óptica científica, envuelta en diferentes matices epistemológicos para poder erigirse como ciencia por su esencia y naturaleza, que decir de la “Sociología Rural” como subdisciplina científica académicamente establecida, en medio de una crisis teórica-conceptual en ella que ha impactado en la credibilidad respecto a los presupuestos básicos expuestos y con los que ha operado hasta ahora el sociólogo rural dentro de la misma.

El presente trabajo es un ejercicio de reflexión, dando una panorámica general de los inicios y desarrollo de la Sociología Rural y su manifestación en algunos países de América; ahondando en los esfuerzos dirigidos a institucionalizar, analizar y actualizar esta subdiciplina, de acuerdo a los avances en el pensamiento sociológico. Observando factores característicos de la interacción que prevalece en la vida social de la esfera rural, dejando entrever la premisa de que, los conceptos sociológicos básicos con los que se han venido tratando hasta el día de hoy los fenómenos sociales rurales son insuficientes para explicar el cambio social en las sociedades rurales. Vislumbrando así a manera de comentario diagnóstico, el estado que presenta la Sociología Rural como rama especial de la Sociología.

Partiendo en lo mencionado por García Ferrando, en su texto: “La Sociología Rural En Perspectiva: Una Evaluación Crítica”. A nivel institucional, actualmente la Sociología rural ha alcanzado sus cotas más altas tanto académica como profesionalmente. Eventos como el primer curso de Sociología Rural (dado por el profesor Henderson, Universidad de Chicago, 1894-95), un IV Congreso Mundial de Sociología Rural (Polonia, Agosto, 1976) y la creación del cuerpo de sociólogos rurales dentro del contexto español, adscritos éstos al Instituto de Reforma y Desarrollo Agrario (BOE, Junio, 1973) sirven de muestra de la aparente madurez alcanzada y del interés que despiertan los estudios sociológicos sobre la sociedad rural. Sin embargo, detalla García Ferrando, junto con ésta afirmación institucional de la Sociología Rural, también ha crecido el consenso entre un grande sector de la profesión de que ésta disciplina, como rama especial de la Sociología general, se encuentra en crisis, siendo la opinión más amplia al respecto, que los conceptos sociológicos usados hasta hoy para el análisis de los fenómenos sociales rurales son ya insuficientes tanto para explicar los cambios sociales en las sociedades rurales, como para seguir estructurando teoría al respecto partiendo siempre y únicamente de los mismos. Por esto que según Ferrando, sus utilizadores, es decir, los sociólogos rurales, se han convertido en prisioneros del uso que se hace de tales conceptos. Una afirmación, ésta última, que golpea y a la vez debiera despertar y sensibilizar constructivamente nuestro ego profesional como visionarios del mundo. La forma en la que muchos ojos miran al profesionista sociólogo.

La Sociología Rural, como subdisciplina científica académicamente establecida, tiene sus orígenes en los Estados Unidos en los comienzos del siglo XX, momento en que se presenta una tendencia hacia la especialización y la investigación detallada y empírica en Sociología. Aunque ya durante las dos últimas décadas del siglo XIX, la Universidad de Chicago ofrecía cursos de Sociología Rural, y la Universidad de Columbia, a través de Franklin H. Giddings (Sociólogo estadounidense considerado uno de los fundadores del neopositivismo sociológico), comenzó a interesar y a preparar a estudiantes graduados en el estudio sociológico de las comunidades rurales.

Por otra parte la preocupación gubernamental americana por el tema de la pobreza y de las condiciones de vida en el campo, condujo a la realización de numerosos estudios empíricos, financiados y dirigidos por humanistas con escaso o nulo conocimiento teórico sobre el pensamiento sociológico. El carácter provinciano y el aislamiento teórico de la sociología rural americana se consolidó en estas primeras décadas del siglo XX.

Ahora bien, como muchas otras ramas o subdisciplinas, la Sociología rural para poder ser institucionalizada tuvo que mostrar los rasgos propios que sustentan tal categorización, como la aparición de libros y trabajos al respecto. Siendo en 1913 cuando aparece el primer libro de texto de Sociología rural. Posteriormente más libros de texto (orientados más a la reforma ideológica que a la presentación sistemática de conocimientos sociológicos sobre el medio rural. Teniendo así una definición de la misma por Paul L. Vogt (Universidad de Ohio, 1917) como:

“La Sociología Rural, es el estudio de las fuerzas y condiciones de la vida rural como base para una acción constructiva en el desarrollo y mantenimiento de una civilización científicamente eficiente en el campo”.

No obstante, la pobreza teórica de los libros de texto de Sociología Rural ha sido y sigue siendo destacada por diversos autores. Llegando incluso entre los mismos a declaraciones tales como; “pocos libros de texto de sociología rural pueden compararse con libros de segunda clase de Sociología general”.

Resaltando al respecto que, quizá la razón principal de ésta pobreza teórica habría que buscarla en el afán exagerado de muchos sociólogos rurales por presentar los contrastes que existen en la sociedad únicamente a través de la dicotomía rural-urbano.

Una dicotomía que bien podría decirse, ha restado visión al sociólogo al propiciar encuadrar los estudios sociales rurales a manera casi siempre de una comparación con las sociedades urbanas. Es decir, se ha tratado de estudiar la vida social en la esfera rural poniendo siempre una tilde a manera de estudio comparativo con la metrópolis. Y no es que se deba dejar de lado todo concepto de urbanidad al momento de un estudio de lo rural; pues se entiende que son sociedades diferentes pero a la vez son parte también de una misma sociedad que las engloba de acuerdo a un territorio donde finalmente existe un impacto de lo rural en lo urbano y viceversa, pero sí es necesario enfocar de manera más específica aspectos y variables estructurales de importancia

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