Ensayo Facundo Cabral

Facundo Cabral es un cantautor argentino nacido el 22 de mayo de 1937 en la ciudad de la plata, Provincia de Buenos Aires, Argentina a temprana edad, su padre abandonó el hogar dejando a su madre con sus tres hijos, los cuales emigraron hacia tierra del fuego, al sur de Argentina, Cabral tuvo una infancia dura y desprotegida, convirtiéndose en un marginal al punto de ser encerrado en un reformatorio, al poco tiempo consigue escapar encontró a Dios en las palabras de Simeón, un viejo vagabundo.

De otro modo alguna vez escuchó que a su madre le dijeron que en Buenos Aires había un presidente que les daba trabajo a los pobres. Fue así como Facundo viajó a la edad de nueve años a la capital argentina e hizo acto de presencia en la casa rosada, donde conoció a Juan Domingo Perón y a su esposa Eva Y Eva Perón exclamó: Por fin alguien que pide trabajo y no limosna Por supuesto que hay trabajo, mi amor, siempre hay trabajo, encárguense del niño exclamo, le llevaron a un lugar, le dieron ropa nueva, lo bañaron después de meses, comió comida caliente, se sintió respetado, sintió que era parte de la sociedad, Eva Perón fue la primera cosa bella que vio en la vida, fue así como le consiguieron un trabajo a su madre en Tandil, provincia de Buenos Aires, a 400 kilómetros de distancia de la capital.

Por otra instancia Facundo Cabral nos mostró lo enfermizo que es pensar una cosa y hacer otra, lo cual nos produce conflictos constantes, el fue coherente, alcanzó una percepción universal de felicidad y tristeza, de éxito y fracaso, para alcanzar así los más altos estados de conciencia, Para tener una visión equilibrada del universo, debemos escuchar todas las voces y a nuestra intuición, donde todos somos sabios, sabiduría es comprender, y justicia es armonizar diferencias, Facundo Cabral se autodefinía como un vagabundo de primera clase, violentamente pacifista, terriblemente solo y maravillosamente libre, lo caracterizaba su manera de hablar, como si la locura y la poesía vivieran en una misma frase.

Del mismo modo tenía la mirada perdida, o más bien encontrada, como los profetas, reía como los sabios y se hacía preguntas en voz alta, era incómodo por naturaleza y andariego por convicción, su honestidad no tenían día libre, reflexionaba, cantaba, protestaba, cuestionaba, acusaba, defendía, amaba y predicaba sin descanso, se le notaban la influencia de Jesucristo y Ghandi, sus conversaciones y amistad con Jorge Luis Borges, Krishnamurti y santas como la Madre Teresa de Calcuta, evidenciaba su sobredosis de poetas y filósofos, sus encuentros con presidentes y jefes de estado, con multitudes y personajes anónimos del camino y recorrió más de 165 países, luego en 1978, perdió a su esposa y su pequeña hija, quienes fallecen en un accidente de aviación, en los últimos años aprendió a convivir con el cáncer al que llamaba "su inquilino"

Para finalizar es importante resaltar

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